Velocidad, alcohol y drogas empeoraron la siniestralidad viaria

nieves d. amiL / R. Ramos REDACCIÒN / LA VOZ

DEZA

El accidente de Silleda en el que fallecieron dos octogenarios fue uno de los más graves del verano en la provincia de Pontevedra
El accidente de Silleda en el que fallecieron dos octogenarios fue uno de los más graves del verano en la provincia de Pontevedra Miguel Souto

En julio se produjo en Silleda uno de los uno de los sucesos más graves

24 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El verano no ha dejado buenos cifras en las carreteras de la provincia. La velocidad, el alcohol y las drogas alimentaron una siniestralidad, donde cayeron las infracciones por distracciones con el móvil. Mientras se mantiene casi invariable el número de accidentes con víctimas, sí aumentaron los fallecidos, el número de personas hospitalizadas y los siniestros mortales. Los datos desgranados este martes por el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada; el capitán del Subsector de Tráfico, Antonio Piteira, y la jefa provincial de Tráfico, Paula Yubero, obligan a una reflexión por parte de los conductores para contener unos números que empeoran.

Tan solo en los meses de julio y agosto se registraron 15.904 denuncias, un 28 % más que el verano pasado. Entrando al detalle de estas cifras, que dejan una media de 250 infracciones por día, el exceso de velocidad es la que más ha crecido respecto al 2024. Este verano se tramitaron 10.334 denuncias, un 46 % que en el mismo período de hace un año.

A mucha distancia están las alcoholemias. Fueron 1.195 denuncias, un 11 % más que en el 2024, seguidas de las drogas, con un 18 % más que el verano pasado. Ante estas cifras, el subdelegado del Gobierno en Pontevedra reconoce que «velocidad, alcohol, drogas y motoristas son los puntos sobre los que continuar trabajando. Continuamos tropezando en la misma piedra». Y es que los agentes de la Guardia Civil emitieron 25 denuncias por no llevar casco, un 39 % más que hace un año. «Parece increíble que hayan aumentado las denuncias por este motivo», advierte Abel Losada.

El control de los motoristas es, por tanto, una de las señales de alarma. En los meses de julio y agosto se denunciaron 768 motoristas, de los que 217 fueron por un exceso de velocidad, seguido de las infracciones que tienen que ver con los adelantamientos en línea continua (183) y por no cumplir la señalización vertical y horizontal (148). «El número de denuncias a motoristas creció un 31 % con muchas por exceso de velocidad. Nos movemos en unos comportamientos peligrosos», comenta Losada.

Accidentes con víctimas

Los accidentes con víctimas en las carreteras interurbanas de la provincia se mantienen en datos similares a los del año pasado. Si este verano se registraron 175, en el 2024 fueron 182 y la media del último lustro fue de 180. Eso sí, pese a esta ligera mejoría, hubo más muertes, más personas hospitalizadas y más siniestros mortales. De las cinco personas fallecidas, dos eran usuarios vulnerables (motoristas).

El subdelegado del Gobierno analizó cada uno de esos siniestros e insistió en que «en estos cinco accidentes hay un denominador común: imprudencias graves detectadas y que los usuarios vulnerables son las principales víctimas directa o indirectamente».

Uno de los siniestros más graves que se produjeron el pasado estío fue el accidente que tuvo lugar el pasado día 2 de julio en el que perdió la vida un matrimonio de 684 y 83 años tras impactar su coche con otro en el kilómetro de la Nacional 640, a la altura del lugar de Rellas en la parroquia silledense de Escuadro. El matrimonio, que venía de la romería de Escuadro y regresaba a casa, salía de una carretera secundaria para incorporarse a la Nacional. El conductor del otro coche resultó herido grave. Antes de este suceso, en la zona se sumaban quince meses sin accidentes mortales en las carreteras.

Tras analizar los datos del verano, Losada, acompañado de los responsables provinciales de Tráfico, recordó la importancia de atender a las indicaciones de los agentes y lo más importante, a redoblar esfuerzos a las puertas del invierno. «Ahora empeora la visibilidad y el firme», alerta el subdelegado del Gobierno en Pontevedra tras dar a conocer unas cifras que han dejado los valores más altos de fallecidos, hospitalizados y accidentes mortales desde el verano del 2021.

La Nacional 525 a su paso por Deza, entre las once carreteras con más accidentes

Entre las once carreteras de la provincia donde se produjeron más accidentes con víctimas se encuentra solo una de la comarca. Es la Nacional 525, a su paso por la comarca de Deza, en la que se registraron 4 accidentes.

El primer puesto de la lista lo ostenta la PO-552, la carretera autonómica, entre Vigo y Tui con 13 siniestros. Le sigue la A-55, la autovía estatal de entrada a Vigo y también de salida de toda la provincia en dirección a la A-52, con once. En el tercer puesto se encuentra la N-550, con siete accidentes en verano, , seguida de la PO-531, entre Pontevedra y Vilagarcía, con cinco, y la AP-9 con otros tantos. En este ránking de peligrosidad, el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, reconoció que la PO-308, que une Pontevedra con Sanxenxo se cae de este listado al registrarse tres accidentes con víctimas. «A veces se vierten informaciones desenfocadas dando a entender que las carreteras son más o menos peligrosas por su accidentabilidad, pero otras tiene que ver con el ocio o el aumento del turismo, con cuestiones que nada tienen que ver con eso», añadió el responsable provincial