PP y BNG recordaron que la renuncia no es voluntaria, sino que se debe a una condena del TSXG que lo inhabilita durante nueve años por prevaricación
10 dic 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Este martes se certificó la dimisión de Luis Calvo (PAYJ) como alcalde de Agolada. La oficialización de su renuncia tuvo lugar en una sesión plenaria ordinaria a la que no acudió, siendo presidida por su más que probable sucesor, el ahora teniente alcalde Óscar Val. El mismo que asumirá la alcaldía en funciones hasta que se celebre el pleno extraordinario para escoger al nuevo regidor. En un ambiente distendido, sin la tensión de otras ocasiones, la corporación municipal aprobó su renuncia con la abstención del BNG, que al igual que el PP, defiende que la dimisión de Calvo no es voluntaria, sino forzada por una condena judicial.
Luis Calvo anunció su renuncia el 24 de noviembre a través de su perfil de Facebook. En este comunicado aseguraba que su dimisión se debía a una solicitud del BNG, acusando además a nacionalistas y populares de intentar comprar a concejales del PAYJ. Lo cierto es que dos semanas antes el Tribunal Superior de Xustiza (TSXG) condenaba a Luis Calvo a nueve años de inhabilitación por un delito de prevaricación administrativa.
El alto tribunal gallego absolvía al regidor de un delito de falsedad documental en relación con la orden de precintar unas obras en la empresa Lácteos Farelo y rebajaba la inhabilitación especial para empleo o cargo público y para el ejercicio del sufragio pasivo. Aunque Calvo señalaba que la sentencia no era firme, dando a entender que la dimisión era por iniciativa propia, lo cierto es que el TSXG confirmaba el 20 de noviembre que no se presentó recurso alguno contra su dictamen, declarando su firmeza.
«A xustiza é implacable»
Este fue el punto principal del discurso de BNG y PP en el pleno de ayer. La edila de los populares, Carmen Seijas, manifestó que «non dimite por responsabilidade propia, senón como consecuencia directa dunha sentenza xudicial». En este sentido, recalcó que la condena por prevaricación «non é algo menor», acusando al exregidor de «utilizar o cargo de alcalde e os medios do Concello como se fose o seu patrimonio persoal».
Seijas continuó su discurso recordando que «a xustiza é implacable», anunciando el fin de un ciclo marcado «polo amiguismo, a falta de transparencia e ausencia de límites éticos». En cualquier caso, tendió la mano a su supuesto sucesor, Óscar Val. «Esperemos que Val non sexa un monicreque para mover os fíos dende fóra. Ofrecemos a nosa man para abrir unha nova etapa entre goberno e oposición», declaró la portavoz del PP, no sin antes aconsejar al nuevo equipo de gobierno del PAYJ que marque distancias con su predecesor.
Por su parte, Susana Tato (BNG) quiso dejar claro que la dimisión no tuvo que ver con exigencias de su partido. «Pode darlle as voltas que queira, o BNG simplemente presentou un escrito para que o secretario fixera un documento para informar sobre as consecuencias da condena por prevaricación. Vende a película de que se debe ao BNG, pero foi por un fallo xudicial», subrayó la edila nacionalista.
Recalcó que Luis Calvo tuvo «moito tempo» para renunciar de forma voluntaria, pero no fue hasta hace algo más de dos semanas «porque non lle quedou outra saída». Finalmente, quiso dejar constancia de la gravedad de los hechos por los que tuvo que dimitir, advirtiendo que «non é normal confundir o exercicio dun cargo democrático con vontades persoais nin actuar como o amo e señor deste Concello. Ninguén está por riba da lei», finalizó Susana Tato.
Rechazo a la implantación de una planta de biogás
Además de la renuncia, el pleno dirimió algunos asuntos como la moción planteada por el BNG sobre la planta de biogás que se pretende asentar entre Amance y Artoño. Miembros de la plataforma Stop Biometano Agolada estuvieron presentes en el pleno portando carteles en contra de este proyecto industrial por el impacto que podría tener para los vecinos y la naturaleza del municipio.
La propuesta del BNG, que pedía el rechazo «total» de la corporación hacia el proyecto, aprobando la negativa temporal a las licencias para este tipo de plantas con el apoyo del PAYJ y la abstención del PP.
Disponen de diez días para escoger al nuevo alcalde e Isabel Alba Gómez será nueva edila
La dimisión de Luis Calvo pasó lo más rápida posible por el pleno de Agolada. Sin el propio exregidor presente, Val no tomó la palabra y despachó con cierto vértigo este segundo punto del orden del día. Para escoger al nuevo alcalde del concello dezano tendrán que celebrar una nueva sesión plenaria, esta vez extraordinaria, en un plazo no mayor de diez días.
Con la mayoría asegurada, el PAYJ mantendrá el gobierno de Agolada y Óscar Val recogerá el bastón de mando. La salida de Luis Calvo también afecta a los concejales, pues obliga a la entrada de una nueva personal al gobierno. Esta será Isabel Alba Gómez, que formaba parte de la lista electoral del PAYJ en la novena posición.