Colegios estradenses aumentan servicios o proponen métodos alternativos para captar alumnos o motivarlos más
21 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Hace años eran los centros privados los que se esmeraban en ofrecer servicios y propuestas educativas diferenciadoras para que las familias se decidiesen por esta opción frente a la de un colegio público gratuito. El descenso de la natalidad y el progresivo vaciamiento de aulas ha trasladado esta práctica también a los centros públicos, que han ido superándose y ampliando servicios para luchar contra la caída de las matrículas.
En A Estrada, los colegios con menores índices de matrícula son los de la zona rural, sobre todo por el despoblamiento de las aldeas, pero a veces también por problemas de conciliación que obligan a matricular a los menores en centros que disponen de Plan Madruga, servicio de comedor o servicio de atención post almuerzo. Aunque eso signifique asumir el traslado de los pequeños, ya que el transporte escolar público es exclusivo para acudir al colegio de referencia para cada zona. Los centros rurales están reaccionando a estas problemáticas y haciendo todo lo que pueden para intentar llenar las aulas.
Este curso, el CEIP Plurilingüe de Oca es el que cuenta con menos alumnado. Son en total 54 estudiantes. En Infantil de 3 años hubo solo dos matrículas frente a las seis registradas en el curso 2018-2019. Según explica la directora, Rocío Mosquera, para el próximo curso está previsto implantar el Plan Madruga, gestionado por el Anpa, lo que podría ayudar a conciliar a muchas familias del área geográfica del CEIP, junto con el comedor que ya funciona, gestionado por la Xunta a través de una concesión y al que asisten cuarenta pequeños.
Retroalimentación
El colegio trabaja con agrupamientos mixtos -los niños de Infantil conviven juntos- y los de quinto y sexto también están agrupados, pero son doce en total. «Ao ser grupos pequenos é positivo para todos, porque reciben unha retroalimentación», explica Mosquera. El centro trabaja por proyectos, es plurilingüe en todos los niveles educativos y cuenta dos días por semana con una auxiliar de conversación en inglés nativa. Además, ha incorporado a las rutinas del aula la introducción a la robótica.
El colegio ha programado para el jueves 27 a las 12.30 horas una jornada de puertas abiertas para mostrar las instalaciones y explicar el proyecto educativo a todas las familias interesadas.
El CEIP Cabada Vázquez de Codeseda cuenta este curso con 78 alumnos, seis en Infantil de 3 años. Una de sus grandes bazas es el comedor de la Xunta con cocina propia. En su día atrajo a bastantes alumnos del casco urbano. En la actualidad siguen pudiendo matricularse, pero la Xunta ya no está por la labor de autorizarles que usen el transporte escolar y, en el comedor, el primer año, pagan la tarifa máxima.
En busca de la motivación
Aparte del comedor, según explica la directora, Anxos Dono, el colegio está apostando desde el año pasado por un sistema de trabajo diferenciador. Con él no solo se busca captar alumnado de otras zonas -que sería bienvenido- sino, sobre todo, incrementar la motivación. No existen libros de texto, estructuración por materias ni exámenes como tales. Se funciona con contenidos curriculares, especialidades y ámbitos de aprendizaje, buscando la ilusión y motivación de profesorado y alumnos y un aprendizaje significativo. Además, se trabaja la educación emocional en todos los cursos. Para el cuerpo docente está siendo un trabajo extraordinario, ya que tiene que asumir la preparación de todos los contenidos y la formación en este nuevo sistema.
En Codeseda no hay jornada de puertas abiertas, pero la directiva está dispuesta a informar de su proyecto docente y la oferta de servicios a todo el que se acerque al centro. Lo mismo sucede en el CEIP Villar Paramá de Vea, que este curso suma 93 alumnos, 12 de ellos en Infantil de 3 años. El centro tiene previsto ofertar el próximo curso servicio de comedor. Posteriormente, valorará la implantación del Plan Madruga.
El colegio de O Foxo es el más nutrido de los de la zona rural estradense. Este curso cuenta con 113 alumnos, 18 de ellos en Infantil de 3 años. El centro dispone de comedor y Plan Madruga, trabaja con agrupamientos en aulas poco numerosas por decisión pedagógica y apuesta por el cooperativismo y la inclusión. Tiene sección bilingüe en primero y segundo de Primaria y participa en múltiples proyectos educativos. El jueves 27 a las 17,30 horas mostrará las instalaciones y explicará su proyecto docente a todas las familias interesadas.
El CEIP Pérez Viondi celebra una jornada de puertas abiertas el día 28
En el casco urbano, el colegio con más alumnado es el CEIP de Figueroa, con 443 alumnos, 44 de ellos cursando el cuatro curso de educación Infantil. El centro -que aglutina tanto a alumnos del rural como de la zona más próxima del casco urbano- oferta un máximo de 50 plazas por curso -es de línea 2-. Algún año se vio obligado a baremar y a dejar alumnos fuera.
El CEIP Pérez Viondi puede ofertar hasta 75 plazas por curso -es de línea 3-, pero últimamente no se suele llegar a tres aulas por curso. Este curso en cuarto de Infantil tuvo 31 matrículas y el anterior 49. En total, el centro suma en la actualidad 430 alumnos. El viernes 28 a las 17.00 horas ofrecerá una jornada de puertas abiertas para dar a conocer las instalaciones y el proyecto docente. Habrá hinchables, talleres de papiroflexia, globoflexia y pintacaras y merienda. El centro ofrece Plan Madruga, comedor y Plan Concilia.