Finalizan labores de restauración de los altares mayores de las iglesias San Xiao de Guimarei y San Vicente de Berres
08 jul 2020 . Actualizado a las 21:35 h.Las labores de puesta en valor de las iglesias de San Xiao de Guimarei y San Vicente de Berres, comenzadas por la Xunta de Galicia el año pasado, llegan a su fin. El objetivo era restaurar los altares barrocos de estas dos joyas patrimoniales del municipio de A Estrada, que cuentan con un importante valor artístico.
Las actuaciones en ambas estructuras se enmarcan en el acuerdo de colaboración entre la Consellería de Cultura e Turismo y la Archidiócesis de Santiago de Compostela, basado en la conservación y restauración de inmuebles en la diócesis. Así, se destinó una inversión de 110.000 euros para la recuperación de los dos templos estradenses, centrada en el restablecimiento de la policromía y en solucionar los graves problemas de termitas que afectaban a la seguridad de los retablos barrocos.
En los dos altares mayores se procedió a la eliminación de barnices y del repintado, todo con el fin de volver a la gama cromática que poseían originalmente. Como esta policromía recuperada estaba, en muchos casos, seriamente deteriorada, también hubo que realizar un arduo trabajo de reintegración cromática. Los dos retablos tienen una gran importancia cultural y patrimonial, por lo que conseguir que volviesen a lucir como antes era algo prioritario.
Respecto a la iglesia de San Xiao de Guimarei, parte de los trabajos de restauración se dedicó a garantizar la conservación de la estructura. Se desmontó el retablo para acceder a la zona trasera, donde se descubrió que las zonas de apoyo estaban muy deterioradas debido a hongos e insectos. Por su parte, la estabilidad del altar de San Vicente de Berres también se veía amenazada por las termitas, lo que hizo que fuese necesario desmontar el cuerpo central para llegar al fondo del retablo y poder actuar. En ambos retablos se cambiaron los elementos dañados y se aplicaron tratamientos desinfectantes y capas protectoras. Ahora, vuelven a brillar tanto como antaño.