La firma de sidra Rabiosa, elabora esta bebida de forma tradicional poniendo en valor el producto local
20 ene 2022 . Actualizado a las 11:21 h.Lo primero que a uno le viene a la mente cuando piensa en cómo sacarle partido a las manzanas piensa en la sidra. Una bebida en auge con una larga tradición que poco a poco está ganando su espacio frente a otras opciones como los refrescos o la cerveza. Sin embargo, en A Estrada, capital de las manzanas por antonomasia, hay una familia de sidreros que ha encontrado una nueva fórmula para sacar más jugo a esta fruta convirtiéndola en ginebra. No una con sabor a manzana, si no una ginebra de manzana, 100 % ecológica y con la que poner en valor el producto local y su distribución en el entorno en base a los principios del comercio de proximidad.
Esto es lo que lleva haciendo desde el 2018 la cuarta generación de productores de manzana y sidra que encabeza Orlando Villamayor en Pardemarín (A Estrada). Con su firma Rabiosa, creada en 2020 con la distinción del sello del Consello Regulador de Agricultura Ecolóxica (Craega), están dándole un nuevo sentido a la tradición familiar. Una forma de entender la sidra y el aprovechamiento de la manzana, que además de una ginebra única en el mundo, sirve para crear con ella otros productos como zumos o vinagre. Todo ello ligado a un claro compromiso por la defensa del medio ambiente.
Orlando nos explica el proceso por el que crean ginebras con las manzanas ecológicas de cosecha propia en sus fincas situadas en las parroquias de Cereixo, Callobre y Pardemarín. «O que facemos é aproveitar o bagazo, as sobras que quedan a mazá despois de espremela, e logo o destilamos. É un proceso sinxelo, coma se facían antigamente os augardentes», explica. Para dar con esta idea plantearon otras opciones de aprovechamiento del bagazo como piensos o abono, pero pensaron en este método tradicional, «vimos que o destilado de frugais tiña proxección», comenta. El resultado es una bebida aromática y con un buen sabor a manzana, que recomiendan consumir acompañada de una buena tónica, trozos de fruta fresca y hielo en abundancia.
El motivo que hace a esta ginebra tan especial es la variedad y calidad de su matriz, la manzana. Ello hace que sea un producto exclusivo y probablemente único en el mundo. «A nosa xenebra non se pode facer en ningún sitio. Pode ter esencia ou sabor a mazá, pero non teñen o noso proceso de destilación do bagazo», explica Orlando. Esos restos proceden de las 24 variedades de manzanas autóctonas que cultivan de manera ecológica en sus terrenos, lo que le permite tener una calidad inigualable, aprovechando un alimento puramente estradense. Además, la ginebra lleva enebro, puesto que la normativa indica que para considerarla una dry gin debe llevar esta planta, que consigue un punto de esencias botánicas que configuran una bebida única.
El arte de hacer sidra
La firma Rabiosa trabaja no solo para producir bebidas como la sidra, la ginebra o el vinagre, si no para transmitir al público la tradición y los distintos elementos que conforman este proceso. En su proyecto también está el objetivo de que la manzana y sus derivados actúen como agente turístico en la zona. Ofrecen para ello visitas guiadas a los lagares, a los manzanos o jornadas de degustación de sidra que permitan poner en valor un producto local, ecológico que además trata de dinamizar la economía local con diferentes campañas en favor del comercio de proximidad.
Por ejemplo, una de estas iniciativas fue el acuerdo de colaboración con el pub Décadas, un local de ocio nocturno de reciente creación, a quién distribuye la ginebra Rabiosa para promocionarla entre sus clientes con sorteos y sirviéndola como alternativa a otras bebidas, siendo el producto estrella de la noche estradense en una época de carestía de esta bebida alcohólica a causa del brexit.
Esta no será la última invención de Orlando y su familia, que ya planean crear a partir de sus manzanas un whisky o un coñac.