Crespo agradece la implicación de los hosteleros en esta atípica edición
16 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Tímido inicio en un Mes do Cocido tan atípico como la vida que deja la pandemia del coronavirus. Con más de la mitad de la población gallega confinada, es loable que en algunos restaurantes se despachasen ayer los primeros platos dentro del período que hace bueno el lema De San Amaro a San Valentín, Mes do Cocido en Lalín, aunque Crespo señalase que en la práctica se extiende casi un semestre, de noviembre a marzo. En el actual contexto, no es de extrañar el agradecimiento expreso del alcalde «aos hosteleiros que participan nunha iniciativa que sen eles non sería posible», y también la implicación de sectores como las panaderías, carnicerías y empresas cárnicas, fruterías, queserías y distribuidores de vinos y licores.
Indicó Crespo que son 53 firmas de todos esos sectores las participantes en la vigésimo tercera edición del Mes do Cocido, que se ha querido mantener en su fecha tradicional mientras la situación sanitaria lo permita: «Non se poden deixar de facer cousas, non se pode durmir ata chegar á inmunidade de rebaño, que non será antes de fin de ano». Eso sí, es consciente de que no serán comparables los resultados de esta edición a ejercicios precedentes: «Xa contamos con iso, pero a alternativa era non facer nada». Se apostó por tirar hacia adelante y esperar mejores condiciones, siempre respetando los aforos que dictaminen las autoridades sanitarias. Si se suavizan las medidas restrictivas, buscarán hacer campañas que atraigan comensales a Lalín.
Explicó que participan en el Mes do Cocido 24 restaurantes, los mismos que en el 2020, con precios por plato que van de los 22 euros hasta 50, situando la media en 25 euros, con especial cuidado en cuestiones estéticas porque la calidad se constata que es buena, como así se reflejó en una auditoría realizada el pasado año.
Nuevo pin
El pin que podrán encontrar los comensales este año fue diseñado por el artista Paco Pestana. A diferencia de años anteriores, no refleja el cartel anunciador de la Feira do Cocido, sino que es una obra distinta: un cerdo volador, que plasma en arte la frase «se o porco voara ...».
Crespo espera que esas alas impulsen la mejora de la economía. Por lo pronto, demanda a hostelería y comercio la máxima colaboración para cumplir todos los protocolos sanitarios e intentar que Lalín se mantenga en un plano discreto en cuanto a medidas restrictivas: «É unha sorte non estar perimetrados, a ver se aguantamos así, sen medidas máis duras», expresó el alcalde.
Paco Pestana: «Cariño, fidelidade e ternura é o que merece este pobo frío e estraño»
Paco Pestana firma el cartel de la 53ª Feira do Cocido. Crespo destacó su figura y su colaboración altruista para crear una obra «na súa liña, un porco psicodélico no primeiro cartel que recolle a feira como de interese turístico internacional», indicando que como cartelista es de algún modo hijo adoptivo de Lalín.
En una presentación vía Youtube, el artista señaló que le resultaba conmovedor «dirixirme á nada como se se acabara o mundo, e como se esto fora Blade Runner». Señaló que al título oficial de hijo adoptivo de Castroverde, unirá desde ahora «ser fillo putativo de Lalín». Y cerró indicando que «aos meus amigos pasados, antepasados e presentes eu dedicareilles cariño, fidelidade e ternura, que é o que se merece este pobo frío e estraño. Viva Lalín!», cerró Pestana.