Los concellos apenas apuestan en la zona por cámaras de videovigilancia

Javier Benito
Javier Benito LALÍN / LA VOZ

LALÍN

miguel souto

Lalín copa el protagonismo con su presencia en edificios públicos como el Arena, Párking Europa, la biblioteca o en el entorno de la casa consistorial

22 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

En Galicia se extiende el uso de las cámaras de videovigilancia por parte de los concellos, en busca de incrementar el control del tráfico y la seguridad de las personas, como elemento disuasorio contra la delincuencia. En ocasiones incluso se convierten las imágenes captadas en elementos clave para resolver desde actos vandálicos a incluso crímenes. Pero su presencia en los principales concellos de Deza y Tabeirós-Terra de Montes por el momento resulta muy incipiente, con la única excepción de Lalín.

Entre las cámaras de videovigilancia en Lalín destaca su presencia en el entorno de la casa consistorial, aunque fuentes del gobierno local remarcan que están inoperativas tras surgir en su momento controversia por la ley de protección de datos. Incluso llegaba el caso a la Valedora do Pobo a través del Movemento polos Dereitos Civís, con protestas presentadas en el 2014 y 2015, no solo contra Lalín sino también por posibles incumplimientos en el funcionamiento de esas cámaras en A Estrada, Silleda y Vila de Cruces.

Pero mientras estuvieron operativas, como ocurría a principios del 2017, las cámaras ubicadas alrededor del castro tecnológico permitieron captar a los autores de pintadas vandálicas. A pesar de que las imágenes eran borrosas se pudo comprobar que los autores vestían cazadoras con capuchas y portaban pañuelos cubriéndoles las caras para dificultar su identificación. Unas cámaras que estuvieron operativas durante varios años renovándose las autorizaciones por parte de la Subdelegación del Gobierno.

Plan con fondos europeos

En la capital dezana también encontramos sistema de videovigilancia, con el correspondiente cartel anunciador, en la entrada al pabellón Lalín Arena así como en el aparcamiento subterráneo de propiedad municipal, además de en el interior de la biblioteca. municipal Varela Jácome. El Concello tiene solicitados fondos europeos para, entre otras iniciativas, destinar en torno a 600.000 euros a instalar videovigilancia para el control de tráfico en las principales calles del casco urbano. Además de las colocadas por el Concello hay otros edificios públicos que cuentan con cámaras en el exterior, como ocurre con los juzgados de primera instancia e instrucción en O Regueiriño.

En Silleda se vivió una situación similar a la lalinense, ya que se colocaron cámaras en el polígono Área 33. Pero las quejas de Dereitos Civís sobre su funcionamiento y la normativa en vigor llevó al Concello a decidir su supresión.

A Estrada estudia la dotación de estos equipos en los accesos al casco y el paseo peatonal

En A Estrada tienen también en estudio implantar dispositivos de videovigilancia en distintos puntos de casco urbano, como evalúa acometer Lalín si logra fondos europeos, como medida disuasoria para profundizar en la seguridad pública y de control de tráfico. El edil de Novas Tecnoloxías, Manuel Magariños, incidió en que están estudiando las distintas opciones de dispositivos en ferias especializadas, a lo que se sumará a corto plazo la visita a municipios donde ya está en funcionamiento este sistema de vigilancia. De forma paralela se están contemplando distintas vías de financiación para instalar este equipamiento.

Respecto a las localizaciones inicialmente previstas, se prevé colocar cámaras en los acceso al casco urbano de A Estrada, así como en el paseo peatonal que se abre entre la Praza de Galicia y la Porta do Sol. Un espacio donde se concentra una parte importante de la oferta comercial y de servicios, con un significativo tránsito de personas. De esta forma se busca disuadir ante la posible comisión de delitos, como medida preventiva o de carácter probatorio en caso de que lleguen a producirse y se capten con las cámaras.

Manuel Magariños resaltó que ya se estuvo analizando la cuestión de la protección de datos, tras el fallido intento de hace unos años cuando se tuvieron que retirar las cámaras instaladas en espacios como el Teatro Principal.

En las comarcas hubo otros intentos fallidos, en este caso para dotar de videovigilancia los polígonos de Silleda, Vila de Cruces y Lalín, al renunciar los concellos a las ayudas al considerar que resultaban insuficientes.