La UE reforzará el control sobre las empresas para evitar casos como el de Enron o el BBVA
ECONOMÍA
El nombramiento del griego Papademos como vicepresidente del BCE deja al descubierto la lucha por el poder en la institución Los últimos escándalos financieros han hecho saltar la alarma en el seno de la Unión Europea. Por ese motivo, los ministros de Economía y Finanzas de los Quince, reunidos este fin de semana en Oviedo, acordaron ayer reforzar el control sobre el sistema financiero y empresarial para evitar casos como la quiebra de la estadounidense Enron o las cuentas ocultas del BBVA.
13 abr 2002 . Actualizado a las 07:00 h.El plato fuerte de las medidas que preparan los Quince para evitar casos como el de Enron o el del BBVA serán las recomendaciones para mejorar la gestión y el control de las empresas que elaborará el llamado grupo de Alto Nivel de Derecho Mercantil, un comité de expertos creado en septiembre del 2001 e integrado por siete personas, entre ellas el español José María Garrido, secretario del consejo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La reforma recogerá propuestas de cambios legales para mejorar el control interno y externo de las empresas y de los mercados de capitales y deberá quedar perfilada en un documento que los Quince estudiarán en la próxima cumbre de Sevilla. Entre los asuntos que abordará ese grupo de expertos estarán la relación de las empresas con sus auditores, la remuneración de los directivos o la actividad de las firmas de calificación de riesgo. Malestar belga La negociación sobre este punto fue como la seda, pero no ocurrió lo mismo con el espinoso tema de la renovación de la cúpula del BCE. En un mensaje de móvil a los periodistas acreditados en Bruselas, la Presidencia española de la UE comunicó, poco después de las dos de la tarde, el acuerdo del Ecofin sobre la elección del griego Lucas Papademos para sustituir al francés Christian Noyer en la vicepresidencia del BCE. La noticia apareció también recogida en la web de la presidencia ( www.ue2002.es ). Pero, apenas dos horas después, se emitía un comunicado en el que señalaba que la información publicada en la web había sido «difundida por error». Algunas fuentes señalaron que la delegación belga, que defendía a su candidato, el economista y senador Paul Grauwe, se había molestado al saber que había sido difundida esta información antes de estar totalmente cerrado el pacto entre los ministros.