Previsiones que no invitan precisamente al optimismo

La Voz

ECONOMÍA

19 abr 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Con todo, el incipiente optimismo que se respira en algunos ambientes se topa de bruces con las previsiones, en algunos casos aterradoras, de destacados gurús internacionales como los nobeles de Economía Paul Krugman y Joseph Stiglitz, y de los principales organismos internacionales. El último en arrojar un jarro de agua fría ha sido el Fondo Monetario Internacional (FMI), que esta misma semana ha sentenciado que la crisis será «inusualmente larga y profunda» y la salida del túnel, además de «larga» -de al menos tres años y medio a partir del momento en que se toque fondo-, «penosa». «La coincidencia de una crisis financiera con una recesión mundial probablemente provoque una caída de la producción de una gravedad y de una duración excepcional», subrayan los expertos del FMI.

En contra de los presagios de las dos principales autoridades monetarias del mundo, la Reserva Federal y el Banco Central Europeo, que consideran que el despegue se producirá ya el próximo año, a los ojos del organismo que pilota el francés Strauss-Khan la recesión todavía no tiene fecha de caducidad.

Un 2009 «horrible»

El director gerente del organismo mantiene que «el 2009 será un año horrible». Las últimas estimaciones del Fondo apuntan a que la contracción de la economía mundial estará este año entre el 0,5 y el 1%, la más aguda desde la Gran Depresión.

Asustan también y, mucho, las previsiones de la Organización Mundial del Comercio (OMC), que apuntan que las exportaciones mundiales de mercancías disminuirán un 9% este año. De confirmarse, será el mayor varapalo en sesenta años. La caída será aún más severa en los países desarrollados, de alrededor del 10%.