Endesa obtuvo en los primeros nueve meses del año unos beneficios netos de 3.048 millones de euros, un 55% menos que el año anterior, aunque en el negocio eléctrico, sin contar con plusvalías, las ganancias crecieron un 5,1%. En ese período, la compañía generó un 6,2% menos de electricidad que en el 2008, debido a la caída de la demanda que se ha experimentado en España como consecuencia de la crisis económica. Con todo, los ingresos ascendieron a 18.486 millones de euros, un 5,9% más que el año pasado.
El resultado de explotación, en el que no se tienen en cuenta los activos vendidos a E.On en el primer semestre del 2008, ni la plusvalía de la desinversión y el resultado de la venta de activos a Acciona, alcanzó los 4.301 millones de euros, lo que supone un 2,4% más.
Las buenas cifras de Endesa se basan, sobre todo, en el negocio en España y Portugal, donde debido a la venta de activos a Acciona obtuvo unos beneficios netos de 2.600 millones, un 28,7% más que el año pasado, y que aportan una contribución del 85% al resultado global de la compañía. También destaca la evolución del mercado latinoamericano, que permitió a la eléctrica que preside Borja Prado apuntarse unos beneficios de 438 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 29% con respecto a los primeros nueve meses del 2008.
De enero a septiembre, Endesa invirtió 2.608 millones, de los que 1.998 correspondieron a inversiones materiales e inmateriales y 610 millones a inversiones financieras, en su mayoría relacionadas con la compra de activos de la irlandesa Electricity Supply Board. Endesa acumula una deuda neta de 19.318 de euros, un 38% más que a finales del 2008, debido al pago de un dividendo de 6.243 millones, que incluía el reparto de la plusvalía generada por la venta de activos a E.On en junio del 2008.