Bruselas multa con 331 millones a diez firmas de microchips por pactar precios

La Voz BRUSELAS/EFE.

ECONOMÍA

Es la primera vez que las compañías colaboran en la investigación a cambio de rebajas en las sanciones

20 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La Comisión Europea (CE) impuso ayer una multa de 331 millones de euros a diez compañías productoras de chips de memoria para ordenadores por pactar precios, incumpliendo así la normativa de la eurozona.

Las diez empresas multadas son Samsung, Hynix, Infineon, NEC, Hitachi, Mitsubishi, Toshiba, Elpida, Nanya y Micron. Aunque solo una es europea -la alemana Infineon-, todas las firmas venden sus productos en el espacio económico europeo (EEE) por lo que deben cumplir la legislación comunitaria en la cual se prohíben las prácticas que reduzcan las capacidades de la competencia en cualquier sector del mercado. Según la CE, Estados Unidos también investigó el caso.

El cartel -convenio entre las empresas para evitar la mutua competencia- estuvo en funcionamiento entre julio de 1998 y junio del 2002. Se trataba de una red de contactos en la que las distintas firmas compartían información que debía permanecer en secreto. Con esos datos se coordinaban para igualar sus niveles de precios en los chips que vendían a fabricantes de ordenadores en Europa.

Para el cálculo del importe de las multas se han tenido en cuenta la cantidad de ventas de las empresas en la Unión Europea, la naturaleza de la violación de la ley y el alcance geográfico de la infracción, por lo que la firma que ha recibido la sanción más elevada ha sido la surcoreana Samsung por 145 millones de euros.

Reducciones en las multas

Esta es la primera vez que el Ejecutivo comunitario emplea un procedimiento creado en el 2008 que permite, a pesar de tratarse de un acto ilícito, aplicar una reducción del 10% de la multa si las compañías implicadas reconocen su culpa. Además, se incluye una rebaja en el castigo económico por indulgencia para las compañías que antes informen sobre las irregularidades.

En este caso, Micron fue la primera en advertir de la existencia de este cartel a la Comisión en el 2002, por lo que fue considerada inmune por el Ejecutivo europeo, que le redujo la multa íntegramente. Entre diciembre del 2003 y febrero del 2006 varias compañías involucradas pidieron clemencia a la Comisión Europea. Finalmente, cinco empresas cooperaron con la investigación y se rebajó su sanción en porcentajes que iban desde el 18% hasta el 45%. Todas las firmas reconocieron su implicación tras recibir una notificación en febrero de este año y se beneficiaron del descuento del 10%.

Joaquín Almunia, como comisario de Competencia de la Unión Europea, apuntó que este tipo de procedimientos «permiten acelerar las investigaciones, liberar recursos para trabajar en otros casos y mejorar el nivel de eficiencia en sus misiones de lucha contra el monopolio».

Esta reducción del proceso, según el comisario, favorece a los contribuyentes, al reducir los costes en la investigación, y a las empresas, por poner en marcha una toma de decisiones más rápida y ofrecerles rebajas en las sanciones si cooperan.

«La primera decisión de este tipo es un hito histórico en la división antimonopolio de la Comisión. Reconociendo su participación en el cartel, las compañías han permitido al Ejecutivo cerrar esta larga investigación», declaró Almunia.