Sobre la inflación, el jefe de la Reserva Federal estadounidense, dio una explicación detallada de cómo la subida de la gasolina ha sido la responsable de ese aumento.
28 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Ayer las televisiones estadounidenses emitieron en directo una rueda de prensa, un acto que había despertado una expectación enorme. Era la comparecencia de Ben Bernanke, el jefe de la Reserva Federal estadounidense, la Fed. La primera que da y no será la última. El banco central ha anunciado que su presidente se someterá a las preguntas de los periodistas cuatro veces al año.
Bernanke habló de la situación económica, la inflación y las acciones contra la crisis. Sobre la inflación, hizo una explicación detallada de cómo la subida de la gasolina ha sido la responsable de ese aumento. Aseguró que la institución que dirige sabe que eso afecta a la economía familiar. En un intento evidente de mostrar su proximidad a la gente corriente, Bernanke explicó cómo que la gasolina se encarezca hace que ir al trabajo sea más caro y, a su vez, eso consigue que las familias tengan menos dinero para gastar.
Sobre el fin de los programas de estímulo económico, dio, por primera vez, una fecha más concreta. Preguntado sobre cuándo prevé que se comiencen a subir los tipos de interés, Bernanke dijo que utilizan la expresión «prolongado espacio de tiempo» cuando no saben exactamente cómo va a evolucionar la economía. Pero añadió también que cree que deberán pasar aún «dos reuniones» antes de la subida de los tipos de interés. Por ahora se mantienen entre el 0% y el 0,25%.
De la ralentización de la recuperación durante el primer trimestre de este año en Estados Unidos, el jefe de la Fed afirmó que creía que «sería temporal» pero también presentó unas estimaciones de crecimiento rebajadas. Un 3,1% para este año, un 3,5% para el 2012 y «aún más» en el 2013. Explicó que esa rebaja en las expectativas se debe a que se ha considerado que el sector de la vivienda sigue «muy deprimido».
Sobre la situación del mercado laboral, Bernanke aseguró que «estamos saliendo de un pozo muy profundo», aunque considera que Estados Unidos ya está en el camino «adecuado». Pero estar en el camino adecuado no significa, según el presidente de la Fed, que «el mercado laboral esté en buena forma». Reconoció un déficit de 7 millones de puestos de trabajo.
Habló además de los problemas del déficit público y emplazó al Gobierno y al Congreso del país a que se decidan a enfrentar unidos la cuestión. «Si no se actúa pronto, tendrá consecuencias graves», concluyó Bernanke.