La mayor parte del endeudamiento se debe a la compra de cuota láctea
08 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La producción de leche en Galicia atraviesa el peor momento de toda su historia reciente. La deuda de las 11.000 explotaciones que continúan en activo sobrepasa ya los 600 millones de euros y amenaza con obligar al cierre a un buen número de granjas que se encuentran al borde de la quiebra pues no disponen, siquiera, de los recursos suficientes para hacer frente a sus gastos fijos.
En este sentido, los bajos precios de la leche en origen y el incremento continuado de los costes de producción están provocando que muchos profesionales se vean obligados a aplazar pagos a proveedores e incluso renegociar el vencimiento de los créditos bancarios que tienen suscritos.
Según un estudio realizado por la Organización de Productores Lácteos (OPL) la deuda media de las granjas gallegas ronda los 60.000 euros y se sitúa como una de las más altas de todo el Estado. «En Galicia existía una carencia importante de infraestructuras y sobre todo de cuota láctea con relación a otras regiones productoras. De ahí que la inversión realizada en los últimos años fuese sensiblemente mayor aquí que en el resto de zonas», apuntan los autores del estudio donde se cuantifica en más de 1.100 millones de euros el desembolso realizado en la adquisición de mayores cupos de producción, durante el período 2000-2005, último ejercicio en el que se permitieron las transacciones entre particulares. Este es uno de los conceptos que más ha hipotecado a las explotaciones de la comunidad y, de hecho, se calcula que todavía más de 300 millones están pendientes de amortizar dado que la mayoría de los cupos se pagaron con créditos suscritos a diez años que acabarán de abonarse en el 2015, anualidad en la que, paradójicamente, las cuotas lácteas pasarán a la historia.
Más tardarán, sin embargo, en amortizarse definitivamente las inversiones realizadas en la compra de maquinaria y en la modernización de instalaciones que se elevan, durante los últimos cinco años, a más de 700 millones de euros.
«A maior parte do endebedamente das granxas débese á nefasta xestión que se fixo, no seu día, das cotas lácteas. Aquí obrigóusenos a desembolsar cantidades importantes de diñeiro na compra de maior volume de cupo baixo ameaza de sancións e de deixar de recollernos a produción. Agora vese que todo aquel diñeiro foi tirado porque as cotas xa carecen de ningún valor, apunta José Agra, ganadero de Santa Comba y representante gallego de OPL. El granjero justifica, sin embargo, las fuertes inversiones realizadas en la mejora de las infraestructuras productivas de las granjas, imprescindibles -señala- para ser competitivos, ahorrar costes de producción y cumplir las directrices europeas.
«Cunhas normativas de calidade do leite, uso de fitosanitarios ou benestar animal cada día máis esixentes, á maioría das granxas non nos quedou máis remedio que investir diñeiro en construcións e maquinaría. Aquí non se desperdiciou un euro», precisa al tiempo que culpa a las industrias lácteas del mal momento que atraviesa el sector. «Aquí hay un solo culpable, non nos engañemos, e son as industrias lácteas que seguen mantendo un prezos anormalmente baixos incluso nun momento onde toda a industria europea subiu as cotizacións en orixe».
Según el último informe de precios publicado por el Fondo Español de Garantía Agraria, los ganaderos gallegos se encuentran entre los peor pagados de todo el territorio nacional. El propio Ministerio de Medio Rural reconoce en un reciente estudio que una explotación media gallega debería cobrar la leche, al menos, a 33 céntimos para moverse en cifras mínimas de beneficio neto. El precio actual que perciben apenas sobrepasa los 30.
33 céntimos de ?
Precio de beneficio
Los ganaderos tendrían que cobrar el litro a 33 céntimos para moverse en cifras de beneficio.
66.000 ?
Deuda media
El importe medio de deuda por granja es de 66.000 euros, uno de los más altos del Estado.