«Nosotros nos hemos limitado a trasladarles nuestras propuestas y ellos a escuchar», explicaron desde la patronal
26 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Más de dos horas de encuentro. Y ni una sola concreción sobre cómo resolver el gran dilema: desatascar el concurso eólico que tramita la Xunta de Feijoo y que se halla parado por factores externos a Galicia, como la reforma del sector energético y el fin de las primas a las renovables, y por un escenario de impuestos autonómicos que, según las empresas gallegas, no guarda un equilibrio con los parámetros actuales de rentabilidad. Feijoo insinuó esta semana una rebaja fiscal a las empresas que explotan o prevean construir parques, pero el conselleiro de Economía, Francisco Conde, no trasladó ayer al sector ninguna propuesta sobre este asunto en la reunión que mantuvo en Santiago con la Asociación Eólica de Galicia (EGA).
«Nosotros nos hemos limitado a trasladarles nuestras propuestas y ellos a escuchar», explicaron desde la patronal. Uno de los principales escollos se halla ahora en la tributación del impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP) con el que la Xunta grava las autorizaciones de los parques. Mientras las empresas consideran que se trata de un impuesto que no se justifica, como así lo acredita la última resolución de Hacienda, la Xunta considera -como sostiene Feijoo- que tendrán que hablar los tribunales. El Gobierno gallego es partidario de ofrecer algún tipo de bonificación fiscal, pero las empresas eólicas tienen decidido que no se desarrollarán los parques del concurso en este escenario. De hecho, algunas ya se han negado a recepcionar autorizaciones para no tributar por ITP.
El departamento que lidera Francisco Conde entiende que la reunión celebrada ayer sirve para evaluar las medidas que permitan el desarrollo del sector en un contexto como el actual, en el que se hace necesario reducir el déficit de tarifa sin que ello suponga acabar con un sector estratégico.