Exige la valoración homogénea de las entidades que deban recapitalizarse
18 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Esta tarde, los presidentes o consejeros delegados de los 16 bancos españoles que van a estar en la órbita de la supervisión única del BCE conocerán la metodología que se va a aplicar en la valoración de sus activos, ejercicio previo a asumir la supervisión y del que quedan muchas cuestiones por aclarar.
Se trata de una reunión preparatoria con el presidente del regulador europeo, Mario Draghi, en la que la banca española planteará la necesidad de que las reglas de juego sean iguales para todas las entidades europeas. Draghi también se reunirá hoy con los franceses, griegos, irlandeses y estonios. La semana pasada lo hizo con los alemanes.
El sistema bancario de la eurozona ha vivido una crisis sistémica en los últimos años, con intensas tensiones en los mercados bancarios, en los de deuda soberana, y una restricción del crédito que ahoga aún más las posibilidades de recuperación económica. Con el Mecanismo Único de Supervisión, por el que en noviembre del 2014 el BCE asumirá la vigilancia directa de 130 entidades financieras europeas (cuyos balances superan los 30.000 millones), 16 españolas, se pretende acabar con la fragmentación de los mercados y la desconfianza en el sistema bancario.
La homogeneidad en las pruebas y la forma de valorar es una condición imprescindible para las entidades. «No puede haber una supervisión única con reglas distintas», afirman desde el sector. Por ejemplo, se exige un nivel de solvencia igual a todas, pero la forma de construir esa solvencia es distinta, y el esfuerzo exigido, también. Por eso, la banca reclama medidas en este ámbito, algo que ya fue estudiado por el Banco de España y por el regulador europeo sin que se llegara a una conclusión.
Exigencias de solvencia
La solvencia exigida es alcanzar un 8 % de capital de máxima calidad, pero la forma de calcularlo es el resultado de dividir el capital por los activos ponderados por riesgo y aquí sí hay diferencias entre países y entre entidades. La causa es que Basilea II, el acuerdo para medir la solvencia de un banco según su nivel de capital, permitió que las entidades pudieran estimar su riesgo siempre bajo autorización del supervisor.
Según un informe de Oliver Wyman, que compara la situación en Francia, Alemania, Italia, España y el Reino Unido, las normas en España son más conservadoras y prudentes.
En la práctica, eso significa que es más difícil llegar al nivel de capital exigido. ¿Cuáles son las diferencias? Por ejemplo, en España un préstamo se considera moroso a los 90 días de una falta en un plazo de pago, en Italia y el Reino Unido a los 180 días, aunque están caminando hacia una reducción de este plazo. Cómo se determina si los activos están más o menos dañados y cuánto capital va a consumir son también elementos muy relevantes para los que se exige homogeneidad de criterios.
EVO se vendió a la mejor oferta
El Gobierno ha vendido EVO Banco al mejor postor, atendiendo a las ofertas económicas recibidas y, con ello, ha logrado el objetivo de minimizar el coste que el rescate de dicha entidad ha tenido para los contribuyentes.
Así consta en una respuesta escrita al diputado socialista José Blanco, que se interesó por la venta del 100 % de la entidad bancaria perteneciente a la nacionalizada NCG al fondo de inversión estadounidense Apollo Management International por 60 millones. «Apollo es un agente que participa en el mercado español desde hace tiempo y que ya tenía licencia para la prestación de servicios financieros a través de un Establecimiento Financiero de Crédito», añade el Ejecutivo.