Hasta la empleada del hogar del expresidente de la compañía tenía a su nombre una de las principales empresas pantalla
16 jul 2014 . Actualizado a las 19:30 h.Las cuentas de Gowex se sostenían gracias a una maraña de sociedades pantalla interrelacionadas entre sí y «administradas» por testaferros, algunos profesionales en la materia y otros más variopintos, como la empleada del hogar del expresidente y fundador de la compañía wifi, Jenaro García.
El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz imputó el martes a los actuales consejeros de Gowex, Francisco Martínez Marugán y Javier Solsona, al exconsejero Ricardo Moreno, que procedía de Codere y abandonó el cargo en el 2012, y a la exconsejera Florencia Maté, mujer de Jenaro García y que dio el visto bueno al último informe anual del grupo.
Pedraz también ha imputado al auditor de Gowex José Antonio Díaz Villanueva y a cuatro presuntos testaferros -Javier Martín Vaquero, Guadalupe Esmeralda Almeida Figueroa, Juan Cañamero González y Antonio Salmerón- por su actividad como administradores de nueve sociedades vinculadas al complejo entramado de falseamiento de las cuentas de la empresa de redes wifi.
En un extremo del hilo, el consejero Martínez Marugán estaba vinculado a las sociedades Panel Consulting y Line Informática Profesional, dos de los tres principales clientes de la división de Netcom de Gowex, que también «compartían lazos» con otro de los imputados, Antonio Salmerón Campos.
Gotham City Research, desconocida firma de análisis hasta hace unas semanas, alertaba el pasado 1 de julio de irregularidades en la facturación de Gowex entre el 2007 y el 2008 sosteniendo que, en la división de Telecom, los principales clientes de Gowex son tres compañías vinculadas a ella.
El principal cliente de la división de la compañía en dicho periodo era SeaSunTel, cuyo administrador era -y es- Juan Cañamero González, otro de los imputados.
El informe señalaba además a un tal Javier González Martín, que a través de PJ Gris Inversiones fue de los primeros en comprar acciones de Gowex. Según Gotham, PJ Gris Inversiones es la contracción de la calle Pintor Juan Gris en la que tiene la sede social SeaSunTel, primer cliente de Gowex y de la que González sería accionista minoritario.
SeaSunTel, Panel Consulting, y Line Informática acaparaban entre el 2007 y el 2008 hasta el 90 % de los ingresos de la división de Telecom, que pasaron de 17 millones en el 2007 a 25,4 millones en el 2013, mientras que los de wireless se dispararon de 0 euros a 157,2 millones en el 2013.
Las tres empresas tienen sede en Madrid: SeaSunTel nació hace 11 años dedicada a los servicios de consultoría e ingeniería técnica, telecomunicaciones, informática y electrónica; Panel Consulting, hace 9 años dedicada a la fabricación y comercialización de equipos informáticos, y Line Informática Profesional, con 18 años de vida, está teóricamente dedicada a la comercialización de equipos informáticos.
Entre los principales clientes de Gowex figuraba también CI Netcom Tic Broker, sociedad que tiene como administradora a Guadalupe Esmeralda Almeida, asistenta del fundador de Gowex. A su nombre también está la sociedad RI Tic Broker y F&M Twenty-One Telecom Network.
RI Tic Broker, antes denominada Reinicia Informática, con sede en Barcelona y 6 años de vida, se dedica -sobre el papel- a la compraventa de fincas rústicas y urbanas. CI Netcom TIC Broker Group, creada hace 6 años en Ontinyent (Valencia) se dedica a lo mismo, al igual que F&M Twenty-One Telecom Network, en este caso con sede en Sevilla y fundada hace exactamente los mismos años.
Paralelamente, la sociedad RI Tic Broker tiene la misma dirección -calle Rocafort, 91, bis ático 1º- que una de las sedes de la firma Companies Intra Legem, especializada en la venta de sociedades inactivas -una actividad legal- y vinculada a Ramón Cerdá Sanjuan, una persona ajena al caso Gowex.
De hecho, según el Borme, Ramón Cerdá fue administrador solidario de esta sociedad hasta enero del 2009, cuando asumió su dirección Esperanza Almeida.
Pero, además, fue hasta mayo del 2010 administrador único de K10-Market Medios Publicitarios, KBK Global Mass Media y Consultoría, Asesoría y Comunicaciones, hasta que lo sustituyó el imputado Javier Martín Vaquero, y hasta enero del 2009, administrador solidario de CI Netcom Tic Broker y F&M Twenty-One Telecom Network, todas ellas vinculadas al
Martín Vaquero figura como administrador, entre otras sociedades, de K10-Market (sociedad también citada en el auto del juez Pedraz), fundada hace cinco años también en Ontinyent.
Además está a su nombre Esperada de Inversiones, antes denominada KBK Global Mass Media y con sede en Santiago de Compostela y un objeto social muy amplio, y Consultoría Asesoría y Comunicaciones, con sede en Madrid, en este caso dedicada al comercio de máquinas y material relacionado con ordenadores, ambas también mencionadas en el auto judicial.
Un largo registro
El registro y el volcado de los datos informáticos contenidos en los ordenadores de la sede de Gowex finalizó pasadas las doce de la noche del martes, tras más de 15 horas en los que una decena de agentes de Policía revisaron e incautaron numerosa documentación localizada en las oficinas centrales de la compañía, situada en el Paseo de la Castellana de Madrid, han informado a Europa Press fuentes jurídicas.
El registro, en el que estuvo presente la secretaria judicial del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, que investiga el falseamiento de las cuentas de la empresa dirigida hasta hace unos días por Jenaro García, se saldó con la incautación de abundantes documentos y material informático, que fueron trasladados en dos cajas de cartón a la sede judicial.
Los agentes buscaban información sobre las auditorías realizadas en los últimos años, los balances y otra documentación que pudiera acreditar, tal y como reconoció García ante el juez, el maquillaje de los resultados que se venía realizando en los últimos diez años, así como de la red de hasta 20 empresas pantalla que el directivo pudo haber utilizado para falsear facturas.
Fuentes de los trabajadores explicaron que la policía llegó a la sede de Castellana 21 sobre las 9.30 horas y les pidió que abandonaran la oficina para proceder al registro de la misma.