El fiscal general ve «prematuro» calificar ahora el uso de tarjetas fantasma
ECONOMÍA
El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, manifestó ayer, antes de que se diera a conocer el desglose detallado de los gastos de los directivos, que aún es «muy prematuro» poder establecer cualquier tipo de calificación de los hechos denunciados ante la Fiscalía Anticorrupción por el uso de tarjetas en negro por parte de los consejeros de Caja de Madrid, y pidió que se deje trabajar a este departamento.
«Estamos en una fase en la que una vez se han descubierto estos hechos la Fiscalía Anticorrupción está recogiendo documentación y está analizándola y estudiándola, para ver si podría deducirse algún tipo de responsabilidad», dijo Torres-Dulce en el Senado, al ser preguntado por este asunto tras cumplimentar el trámite de entrega al presidente de la Cámara alta de la última memoria de la fiscalía.
Sobre las responsabilidades que pudieran derivarse del conocimiento por el Ministerio de Hacienda, desde el año 2007, del uso de estas tarjetas, Torres-Dulce manifestó que no puede anticipar «nada que no esté judicializado o investigado por nuestra parte». «Hay que dejar trabajar a la Fiscalía Anticorrupción con tranquilidad con el rigor con que lo hace y una vez que ésta u otras circunstancias se valoren tomaremos la decisión correspondiente», finalizó.
Por el momento, por este caso el juez Fernando Andreu ha llamado a declarar como imputados a tres directivos: Miguel Blesa y Rodrigo Rato, que fueron los dos últimos presidentes de Caja Madrid; así como al ex director general de la entidad Ildefonso Sánchez Barcoj. Todos ellos tendrán que acudir a la Audiencia Nacional el jueves 16 de octubre.