El 17 % de la producción del grupo ourensano se basa ya en alimentos de calidad como el cerdo cebado con castañas
31 may 2015 . Actualizado a las 12:09 h.Las gamas de valor añadido de Coren, sumando la producción Selecta de cerdo, alimentado con castañas, y los pollos y huevos camperos, que la firma ourensana empezó a comercializar hace veinte años con la recuperación del modo tradicional de cría y una alimentación a base de maíz, ya representan el 17 % de la producción cárnica del grupo. El presidente, Manuel Gómez-Franqueira, al valorar los veinte años del inicio de las producciones camperas, «en las que fuimos pioneros en España y en las que actualmente somos líderes en el mercado», resalta que con esta línea se ha dado respuesta «a las exigencias del consumidor, al que preocupa el bienestar animal y el cuidado del medio ambiente, además de buscar productos de sabor tradicional», según explica.
El grupo Coren se ha situado como líder de España en producciones camperas, es decir, con una crianza tradicional en condiciones de máximo bienestar, disfrutando los animales de salidas al aire libre y con una alimentación completamente vegetal para recuperar sabor y textura. «Los animales se crían totalmente libres de estrés, pasean al aire libre, picotean y se alimentan con los mejores cereales, fundamentalmente maíz», dice Gómez-Franqueira.
Más de 150 granjas
En la actualidad son más de siete millones de kilos de pollos de corral y setenta millones de huevos camperos los que se producen anualmente, según cifras de la propia empresa, que cuenta en Galicia con algo más de 150 granjas especializadas en estas producciones, con cerca de medio millar de puestos de trabajo directamente vinculados a esta línea entre campo e industria. Sumando la actividad generada por la línea de cerdo Selecta la cifra alcanza los 600 empleos.
La vida del pollo de corral se prolonga durante ochenta días, con lo cual se le permite un crecimiento lento y se logra «un producto de la máxima calidad, con una textura y sabor como el de casa, de toda la vida», según resaltan desde medios de la empresa nacida en Ourense.
Coren, que en el año 2012 abandonó la producción en jaula, dispone de más de 250.000 gallinas de puesta de huevos camperos en distintas granjas de Galicia.
Con su modo de vida y su alimentación, basada en el maíz, «los huevos camperos presentar un color y sabor más intensos, como los huevos caseros de toda la vida», indican.