Competencia revela que las marcas de coches amañaron los precios durante 9 años

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

XOAN CARLOS GIL

El informe definitivo concluye que el 91 % del sector de la distribución estuvo implicado en las prácticas anticompetitivas

20 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La persecución iniciada en el 2013 por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) contra el pacto de precios en las redes de ventas de coches en España se saldó el pasado mes de julio con la imposición de multas por valor de 171 millones de euros, repartidas entre 21 empresas del sector.

Pero el informe definitivo que acaba de hacer público Competencia sobre su extensa investigación revela los entresijos de una trama perfectamente orquestada por prácticamente todo el sector de la distribución en España, para amañar precios tanto en la venta, como en el servicio posventa, que se extendió durante 9 años.

Según el documento de más de 100 folios, las empresas implicadas intercambiaron información comercialmente sensible sobre la estrategia de distribución comercial, los resultados de las marcas, la remuneración y los márgenes comerciales de sus redes de concesionarios «con efecto en la fijación de los precios de venta de los automóviles, así como en la homogeneización de las condiciones y planes comerciales futuros de venta y posventa de los automóviles en España», apunta el informe.

Y esto se vino haciendo desde al menos el año 2004, hasta julio del 2013, fecha del inicio de las inspecciones que terminaron provocando una sanción millonaria, que es la mayor impuesta en la historia del órgano regulador de la libre competencia en España.

El documento revela que en los intercambios de información participaron 20 empresas distribuidoras de las marcas Audi, BMW, Chevrolet, Citroën, Fiat, Lancia y Alfa Romeo; Ford, Honda, Hyundai, Kia, Mazda, Nissan, Peugeot, Renault, Chrysler, Jeep y Dodge; Saa, Seat, Skoda, Toyota y Volkswagen, con la colaboración de la consultora Snap-On desde noviembre de 2009.

Reglas de confidencialidad

De acuerdo con las investigaciones, el informe concluye que, «la cuota de mercado conjunta de las marcas participantes en las conductas analizadas en este expediente sancionador estaría en torno al 91 % de la distribución de los vehículos automóviles en España, incluyendo la casi totalidad de marcas denominadas generalistas y alguna de las denominadas Premium».

La CNMC aporta además documentación abundante sobre el operativo montado por las empresas sancionadas para evitar ser descubiertas. Todos estos datos se intercambiaban vía correo electrónico cada seis meses, aunque en ocasiones «cuando la sensibilidad y la confidencialidad así lo exigían se utilizaba el teléfono», reza el informe.

El intercambio se hacia «bajo un acuerdo de quid pro quo, recibiendo datos a cambio de aportar la propia con la calidad y prontitud exigida», recoge el documento que revela detalles como este: «las marcas idearon un sistema de identificación alfanumérico, para identificarse y proteger el secreto»