La mano derecha de Rato dice que fue el Banco de España el que «indujo» la creación de Bankia

j. a. bravo MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

Chema Moya

Norniella refuerza la tesis de su antiguo jefe con la declaración en el juicio

18 feb 2019 . Actualizado a las 20:23 h.

José Manuel Fernández Norniella, quien fue mano derecha de Rodrigo Rato durante su etapa como presidente de Bankia, se unió ayer a la tesis de su antiguo jefe que apunta al Banco de España como responsable de la creación del banco a finales del 2010. «Creo que fue el inductor» del proceso de integración entre media docena de cajas de ahorros encabezadas por Caja Madrid y Bancaja, declaró a preguntas del fiscal jefe anticorrupción Alejandro Luzón, quien sigue representando en los estrados al ministerio público ante la ausencia por enfermedad de la fiscala Carmen Launa.

Norniella es el segundo acusado en declarar por decisión del fiscal, que ha preferido interrogarlo antes que a Francisco Verdú, quien fue número dos del banco como consejero delegado, y a José Luis Olivas, vicepresidente de la entidad en la misma época. Junto a Rato son las únicas cuatro personas a las que imputa un delito por la polémica salida a bolsa de Bankia en julio del 2011, en concreto el de estafa a inversores, y para las que pide penas de prisión que van desde los dos años y siete meses hasta los cinco años.

Norniella ha preferido optar por una defensa técnica y no abundar en la misma idea de posibles conspiraciones políticas apuntada días atrás por su antiguo jefe, quien llegó a culpar a dos Gobiernos distintos de lo ocurrido -el de José Luis Rodríguez Zapatero y el de Mariano Rajoy-, así como al propio Banco de España. Y lo hizo, entre otras cosas, porque, según él, «las decisiones» respecto a la fusión que dio lugar a Bankia y su posterior estreno bursátil se daban «a un nivel muy superior» a aquel en el que él se movía. «Yo como consejero no tuve contacto con institución alguna», apostilló para reafirmar su postura.

Pero él no era un consejero cualquiera. Aunque sí entró en la caja madrileña en el 2006 como un miembro más del órgano de administración, en el 2010 -con Rato ya al frente- se le concedieron responsabilidades ejecutivas y, además, fue ascendido a una de las tres vicepresidencias de Bankia. Pese a ello, y aunque el fiscal le insistió en este aparente poder de decisión, se reafirmó en sostener que sus funciones eran menores: «Cuando todo esto empezó yo no conocía nada, mi función era de trinchera, trabajaba en aspectos muy lineales, de funcionamiento y de logística, y no me metía en temas de estructura de alto nivel».

Sin toques de atención

Por esa razón sostuvo que solo le llegaba una información «superficial» respecto a lo que pudieran decir otras instituciones sobre la situación del banco, incluida la CNMV y el FROB, si bien no recuerda que hubiera llamadas de atención por causas negativas. «El Banco de España, que yo sepa, nunca hizo una manifestación en sentido contrario. Nunca dijo: ustedes están haciendo algo mal», señaló Fernández Norniella en otro intento por apoyar las tesis de Rato, que también fue su jefe en el Ministerio de Economía cuando aquel era secretario de Estado de Hacienda y con quien tenía una relación «de aprecio y respeto».