Inquilinos contra caseros

mercedes mora REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Las reparaciones, los pagos en negro, las fianzas y las subidas del alquiler, los principales motivos de disputa

27 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Nadie dijo que la relación entre caseros e inquilinos fuese fácil. Y como en todas las historias que se rompen, las versiones sobre quién tiene la culpa, siempre son dos. Dicen los propietarios que la ley no los protege lo suficiente y que cuando deciden alquilar una propiedad asumen muchos riesgos, demasiados, empezando por el de la morosidad. Pero, en el otro lado, el de los inquilinos, también hay quejas. Las principales: que los caseros no se hacen cargo de las reparaciones, que retienen las fianzas sin que haya motivo para ello, que les piden pagos en negro, que ponen en el mercado viviendas descuidadas o en mal estado o que se pasan de la raya a la hora de subir la renta.

Lo desvela un informe de la aseguradora Línea Directa elaborado a partir de una encuesta realizada entre 1.700 personas que viven de alquiler en todo el país. Un estudio que deja muy claro que la conflictividad es tónica habitual entre caseros e inquilinos.

Y Galicia no es una excepción. Tanto es así que cuatro de cada diez inquilinos gallegos admiten haber tenido alguna que otra disputa con sus caseros. El 19 % de esos conflictos pasan por una subida del alquiler que consideran «abusiva e injustificada».

Cuatro de cada diez inquilinos gallegos aseguran haber tenido roces con los propietarios Pero la cosa no acaba ahí. Los desencuentros más habituales se producen por culpa de reparaciones que los caseros se niegan a asumir. Y es que, casi la mitad de los encuestados se refieren a este problema cuando se les pregunta por su relación con los propietarios de las viviendas en las que habitan.

Los accidentes que se producen en las casas son también fuente inagotable de conflictividad. Más de la mitad de los participantes en el estudio reconocen haber tenido roces con su casero por este motivo. Los siniestros más comunes tienen que ver con el agua o las inundaciones (un 60 %), los daños eléctricos (21 %) y la rotura de cristales (16 %). Y en las fechas en las que estamos conviene saber que la decoración de Navidad en los hogares es responsable de un 4 % de los accidentes.

También hay desavenencias porque les retienen la fianza (uno de cada cuatro se ha topado con que se niegan a devolverles el dinero depositado como garantía). Y porque los propietarios les exigen una parte de la renta en negro (lo dicen el 20 % de los encuestados).

Y eso no es todo. Además, siete de cada diez arrendatarios gallegos acusan a los caseros de alquilar viviendas «descuidadas» y que precisan de más de un arreglo, por no decir de una reforma integral.

A veces, pocas también hay que decirlo, las disputas se enquistan de tal manera que acaban requiriendo de la intervención de terceros. Esto es, que terminan desembocando en procedimientos de mediación o arbitraje. En Galicia solo uno de cada 10 inquilinos admite haber tenido que recurrir a esa vía para zanjar el conflicto con su casero.

Los más conflictivos

Como reza el refranero, en todos lados cuecen habas. Aunque hay que decir que no en todos los sitios la misma cantidad. Los de las calderadas -siguiendo con el dicho- en lo que a conflictividad entre arrendatarios y arrendadores se refiere son Andalucía, Galicia y Extremadura. En la primera, las desavenencias se dan en el 44 % de los casos; en territorio gallego, en un 42 %; y en Extremadura, en un 41 %.

Galicia es, por detrás de Andalucía, la segunda comunidad con más conflictos En el otro lado de la balanza están La Rioja (14 %), Navarra (24 %) y el País Vasco (28 %), las comunidades donde mejor se llevan caseros e inquilinos. También arroja luz la encuesta sobre los motivos por los que los ciudadanos eligen vivir de alquiler. En el caso de los gallegos, más de la mitad (el 53 %, concretamente) lo hacen porque no les queda otra salida. No tienen dinero para comprarse una casa.