Al inicio de un nuevo ciclo, como el actual, el comportamiento de la renta variable es mejor
03 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El coronavirus seguirá manteniendo ocupados a los inversores en el 2021, incluso tras el anuncio de las vacunas de Pfizer, Moderna o AstraZeneca. Mientras no se extienda la inmunización no será posible recuperar los niveles de actividad previos a la crisis. Además, los expertos no descartan que pueda haber más parones económicos fruto de nuevas restricciones para controlar los contagios. Por eso advierten de que es bastante posible que el nerviosismo regrese a los mercados.
También puede haber volatilidad, como avanza Rosa Duce, de Deutsche Bank, alrededor de los planes de recuperación de EE.UU. y Europa, sobre todo de esta última, por la posibilidad de dificultades en su implementación, sin olvidar que otro foco de atención -como recuerda Luis Fernando Coello, de Banca March- estará en las nuevas relaciones que la Casa Blanca establezca con China.
Es un contexto aún con incógnitas y aconsejan abordarlo con carteras equilibradas, ponderando bien riesgo y activos defensivos, y siendo selectivos.
Comenzando por el riesgo, la Bolsa sigue siendo favorita como inversión. Coello argumenta que al inicio de un nuevo ciclo, como ahora, históricamente el comportamiento de la renta variable es mejor. Sostiene que esa situación «se acrecentará a medida que se produzca la recuperación de beneficios empresariales en 2021».
Por áreas geográficas, Duce cree que si bien a EE.UU. le puede favorecer una mejor realidad económica, Wall Street está más caro. Y, en cuanto al Viejo Continente, aunque sufre mayor debilidad, se espera un fuerte rebote económico. Apunta también que el crecimiento y la política fiscal y monetaria favorecerán a las dos regiones, aunque en ambos casos con incertidumbres, tanto por las dudas sobre el margen de maniobra que tendrá el nuevo presidente Biden, como por la capacidad que demuestren los países europeos de ejecutar la reconstrucción. Quizás -sintetiza- Europa tiene más margen de recuperación, pero si EE.UU. no sube, tampoco lo harán las plazas europeas.
David Macià, de Crédit Andorrà AM, resuelve el dilema geográfico afirmando que la recuperación de los precios ha llevado a unas valoraciones ya holgadas, con lo que no sirve invertir en índices, sino en acciones concretas.
¿Qué hacer con el Ibex?
Respecto a la bolsa española, que se quedó muy rezagada en el 2020, Jorge González, de Tressis, explica que seguirá infraponderándola. No ve atractivo el Ibex-35 por el peso de banca y construcción. Pero Pedro del Pozo, de Mutualidad de la Abogacía, cree que al Ibex le favorece la elevada presencia de compañías con alta rentabilidad por dividendo y que ahora están baratas. Enumera Repsol, Telefónica, Naturgy, Enagás o Endesa. Y a otras cíclicas, como ACS, Acerinox o Mapfre. También Tressis menciona valores españoles atractivos: Cellnex, Solaria, Fluidra, Iberdrola, Rovi, Viscofán, Grifols y ACS. Por sectores, el industrial, el consumo discrecional, el financiero o las materias primas suelen hacerlo mejor en esta fase del ciclo.