La automoción gallega vuelve a máximos de producción rearmada de microchips

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

cedida

Stellantis Vigo y la red de proveedores retoman la contratación de eventuales

07 jun 2022 . Actualizado a las 00:22 h.

Después de dos años de tensiones en la cadena de suministro por el desabastecimiento global de semiconductores, la industria del automóvil deja atrás los parones de los últimos meses y comienza a recuperar un ritmo fluido de producción que hacía tiempo ya que no se recordaba.

Varios fabricantes europeos, como Daimler, BMW, Stellantis y Volkswagen, admiten una mejoría de la situación, que también se está notando en sus fábricas implantadas en España.

En realidad era lo esperado. Todos los ojos estaban puestos en esta segunda mitad de año que está a punto de empezar, en la que todos los informes del sector situaban el inicio de la recuperación. Y aunque algunos fabricantes como Toyota siguen recortando producción por este motivo, la mayoría comienzan a notar mejorías en el flujo de aprovisionamiento, hasta el punto de alcanzar máximos de producción, como es el caso de Stellantis Vigo y su red de más de 120 proveedores de componentes implantados entre Galicia y los polígonos del norte de Portugal.

2.300 coches al día

«Las previsiones de fabricación hasta finales de junio han mejorado por el restablecimiento del suministro de componentes electrónicos», explican desde la factoría gallega, que la semana pasada ya alcanzó su pico productivo de 2.300 vehículos al día, y así seguirá hasta el inicio de las vacaciones en agosto.

Pese a que los coches ensamblados en la factoría de Balaídos siguen teniendo una buena acogida en los mercados, la dirección de la planta viguesa había marcado una serie de días de paro para junio y julio debido a las dificultades de aprovisionamiento de ciertos componentes que estaban afectando en los últimos meses a la empresa.

«Afortunadamente, las previsiones para las piezas que estaban en riesgo a día de hoy han mejorado», afirma la multinacional, que ha vuelto a abrir la contratación, para cubrir las necesidades de producción, aunque, por el momento, no se plantea retomar el arranque del cuarto turno, que se vio obligada a cancelar por la crisis de los semiconductores el pasado año, y en el que estaba prevista la contratación de 600 trabajadores.

El ERTE preventivo que está aprobado hasta final de año se mantendrá, aunque según estimaciones de los sindicatos consultados, el segundo semestre arrancará a la vuelta de las vacaciones de verano con buenas perspectivas. Además, el acelerón de Stellantis Vigo tiene un efecto dominó sobre toda la cadena de proveedores que en los últimos dos años se han visto obligados a activar mecanismo de flexibilidad laboral para afrontar los parones del fabricante. «Actualmente se trabaja a buen ritmo, y las previsiones son buenas, pero los ERTE aprobados van a seguir activos de momento», aclaran fuentes sindicales.

Crisis no superada

¿Se puede dar ya por cerrada la crisis de desabastecimiento de componentes electrónicos por falta de microchips? «Aún no es la situación perfecta, pero estamos mejor que el año pasado [...] No deberíamos celebrarlo demasiado pronto, seguimos monitorizando la situación de cerca», ha asegurado Karin Radstrom, la directora de Daimler Trucks, la marca de vehículos pesados del grupo alemán Mercedes, según recoge Bloomberg.

También desde BMW hablan de una situación «un poco más estable» en la cadena de suministros; y en Volkswagen reconocen mayor continuidad en el abastecimiento, según portavoces citados por la agencia de información económica.

El sector en España acumula en lo que llevamos de año una merma de más de 260.000 vehículos producidos respecto al 2019, el último año previo a la pandemia, 50.000 de ellos correspondientes a Stellantis Vigo; ya que hasta abril solo se habían producido 718.850 unidades, según datos de Anfac, la patronal de los fabricantes españoles de coches. Esto es incluso un 15,4 % menos que en el 2021.

Comienza la fabricación del primer modelo Fiat asignado a la factoría viguesa

Stellantis Vigo, el centro de producción del grupo francoitaliano resultante de la fusión de PSA y Fiat, ya ha comenzado a ensamblar las primeras preseries de su quinto modelo de vehículo comercial ligero. Se trata de la nueva generación del Fiat Dobló que, según fuentes del sector, fue asignado a la factoría gallega (se conocía la adjudicación desde hace ya un año) por su experiencia y especialización en este demandado segmento.

De hecho, tras la fusión, Stellantis Vigo es la planta gallega líder de la multinacional francoitaliana en la producción de vehículos comerciales ligeros. De las instalaciones gallegas salen al año una media de 250.000 unidades con destino al mercado internacional.

Al igual que ocurre con los demás modelos, lo previsible es que la nueva silueta, que será el primer vehículo de la marca Fiat que se fabrica en España, tendrá su correspondiente versión eléctrica. Stellantis Vigo ya produce el todocamino Peugeot e-2008 (supone el 17 % de los 2.300 coches que salen cada día de la planta), al que el año pasado se unieron los seis nuevos modelos electrificados de las marcas Peugeot, Citroën y Opel, cada uno de ellos en dos versiones: polivalente (como furgoneta o vehículo de ocio) o solo comercial.

En junio del 2021, hace justo un año, Stellantis anunció que su factoría británica de Ellesmere Port absorberá una parte de la producción de las furgonetas gallegas, una medida que lejos de preocupar, según fuentes del sector, permitirá liberar espacio en la planta gallega, actualmente al máximo de su capacidad, para el nuevo modelo comercial, cuya salida al mercado está prevista para después del verano.