Las claves del alivio hipotecario: ¿puedo beneficiarme de las nuevas medidas?
ECONOMÍA
Calviño «espera» que todo el sector se acoja al pacto para flexibilizar las condiciones de más de un millón de hogares con créditos variables
22 nov 2022 . Actualizado a las 21:28 h.Después de semanas negociando y de concluir en la medianoche del lunes sin un acuerdo formal, más allá de las medidas principales, el Consejo de Ministros ha aprobado este martes ampliar y mejorar el Código de Buenas Prácticas por el que las entidades financieras aliviarán la presión que las hipotecas variables suponen para más de un millón de hogares, que están sufriendo el incremento incesante de sus cuotas mensuales, a caballo del alza de los tipos de interés y de una inflación que no da tregua.
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, admitió en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, que «espera» que todo el sector financiero se adhiera al pacto, aunque hasta el momento sólo Caixabank ha confirmado que lo hará, como anunció Calviño, apelando a que «es momento de arrimar el hombro». El resto de entidades, cuyos principales ejecutivos participaron durante la mañana en unas jornadas de banca organizadas por Deloitte y ABC, valoraron con cautela las implicaciones de suscribirlo, una decisión que aún deberán someter a la consideración de sus órganos internos. El más crítico fue el consejero delegado del Banco Santander, José Antonio Álvarez, que aseguró que no firmarán si se pone en peligro la salud y solidez del mercado en el futuro, ya que considera que las medidas pueden obligar a elevar las provisiones.
Calviño se mostró optimista sobre el alcance del pacto que, sin embargo, ha recibido críticas de sus socios de Gobierno, que lo consideran «mejorable» y que abogan por medidas de obligatorio cumplimiento, en lugar de un código de adhesión voluntaria. En este sentido, la vicepresidenta defendió el buen funcionamiento de esta fórmula, que Ejecutivo y banca han aplicado en numerosas ocasiones en esta legislatura y que -insistió Calviño- «es de adhesión voluntaria», pero de «cumplimiento obligatorio» una vez firmado. Al respecto, destacó que el Consejo de Ministros también ha aprobado este martes la creación de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, que tendrá competencias en este sentido.
El pacto, que mejora el tratamiento de las familias vulnerables (unas 350.000), también se amplía a más de 750.000 familias de clase media «en riesgo de vulnerabilidad». Facilitar la amortización anticipada de los créditos, convertirlos de tipo variable a fijo o la dación en pago son algunas de las medidas que se analizan a continuación, con el resto de claves para acceder a las ayudas:
¿qué bancos ofrecerán el alivio hipotecario?
De momento, Caixabank. Aunque el acuerdo se ha gestado entre el Gobierno, el Banco de España y las patronales del sector financiero (AEB, CECA y UNACC), que representan respectivamente a los principales bancos, cajas y cooperativas de crédito del país, en la noche del lunes no se pudo contactar con todas las entidades que las integran, de modo que aún no se ha confirmado el acuerdo con todo el sector. La vicepresidenta sí anunció que la primera entidad del país, Caixabank, participada por el Estado, ha confirmado su adhesión y se mostró confiada en que todo el sector lo secunde.
¿Quién puede solicitar las medidas?
No solo los hogares vulnerables. El Gobierno estima que más de un millón de hogares verán reducida la asfixia que la subida del euríbor les está suponiendo su su hipoteca. Calviño calculó que uno de cada tres hogares hipotecados podrán acogerse. Y es que se ampliará su cobertura más allá de los considerados deudores vulnerables (en el umbral de exclusión) en el actual Código de Buenas Prácticas bancarias, que data del 2012. Entre ellos estaban, por ejemplo, las familias numerosas, unidades familiares con algún miembro con discapacidad superior al 33 %, familias monoparentales con hijos a cargo, unidades familiares con una víctima de violencia machista o con un deudor mayor de 60 años, así como que el conjunto de los ingresos no rebase el triple del IPREM anual, es decir, 25.200 euros. Así, dicho código en vigor se actualiza para permitir reestructurar un préstamo a tipo variable con un interés más bajo durante la carencia del principal de 5 años (euríbor menos 0,1 % frente al euribor más 0,25 % actual).
También se amplía a 2 años el plazo para solicitar la dación en pago de la vivienda y se contempla la posibilidad de una segunda reestructuración, de ser necesario.
Los hogares con rentas inferiores a 25.200 euros al año que dediquen más del 50 % de los ingresos mensuales al pago de la hipoteca, aunque no vean incrementada en un 50 % el esfuerzo hipotecario, también podrán acogerse al código con una carencia de 2 años, un tipo de interés menor durante ese tiempo y un alargamiento del plazo de hasta 7 años.
¿Cuánto se puede ahorrar?
Más del 50 % de la cuota. Sobre el alcance que la flexibilización puede tener en el bolsillo de las familias en dificultades, Calviño explicó que podía ser de entorno al 50 %. La vicepresidenta puso como ejemplo el de un hogar con una hipoteca tipo de 120.000 euros y una cuota mensual de 524 euros, que tras la revisión de tipos de interés, vería reducida su cuota durante el período de carencia de cinco años más de un 50 %, hasta los 246 euros.
se amplía los hogares de clase media
Colectivo en riesgo. La novedad de este alivio hipotecario es que al código actual se le suma otro nuevo, orientado a facilitar el pago a familias de clase media que atraviesan dificultades oir la escalada de los intereses. Así, se incluyen hasta una renta de 29.400 euros anuales, y se les considera en riesgo de vulnerabilidad por el incremento de la cuota hipotecaria, si se come más del 30 % de sus ingresos tras una subida de al menos el 20 %. Para este colectivo, estimado por el ministerio en más de 750.000 hogares, las entidades financieras tendrán que ofrecer la opción de congelar 12 meses la cuota, con un tipo de interés menor sobre el principal aplazado y un alargamiento del plazo de amortización de hasta 7 años.
cambiar a tipo fijo
Menores costes. Otra de las palancas de ayuda es la de rebajar aún más los gastos y comisiones asociadas al cambio de una hipoteca de tipo variable a otra fija. Para facilitarlo se eliminarán las comisiones por amortización anticipada y cambio de hipoteca durante el próximo año.
Plazo para entrar en vigor
Un mes para informar y aplicarlo desde el 1 de enero. La ministra de Asuntos Económicos explicó que el objetivo es que todas las entidades bancarias se adhieran a los nuevos Códigos de Buenas Prácticas en el plazo de un mes, ya que la pretensión es que estén en vigor el 1 de enero del 2023. Asimismo, deberán informar individualizadamente a los clientes de la posibilidad de acogerse a las medidas de alivio hipotecario, que también deberán de publicitar «en un lugar destacado» de las web de las entidades y a través de su red comercial de oficinas.
La banca dice querer ayudar a los clientes, pero fía su adhesión a que la letra pequeña no les perjudique
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, apeló a la necesidad de que todos «arrimen el hombro» para confiar en que todo el sector financiero se adhiera al pacto hipotecario que hoy publicará el Boletín Oficial del Estado. Sin embargo, admitió que por el momento solo CaixaBank (participada por el Estado) ha confirmado que lo hará.
El resto de entidades, cuyos principales ejecutivos participaron ayer en unas jornadas financieras organizadas por Deloitte y ABC, valoraron con cautela las implicaciones de suscribirlo, una decisión que aún deberán someter a la consideración de sus consejos de administración.
En este sentido, las grandes entidades (Santander, BBVA o Caixabank) coincidieron en manifestar su disposición de ayudar a los clientes hipotecados que estén atravesando problemas, pero no dieron por segura su adhesión hasta que no conozcan la letra pequeña del decreto, y se cierren los aspectos técnicos pendientes. Sin embargo, fuentes del ministerio descartaron negociar más, ya que el texto aprobado por el Consejo de Ministros se publicará hoy en el BOE y no habrá cambios.
El más crítico fue el consejero delegado del Banco Santander, José Antonio Álvarez, que aseguró que no firmarán si se pone en peligro la salud y solidez del mercado en el futuro, ya que considera que las medidas pueden obligar a las entidades a elevar las provisiones. También la presidenta de la patronal bancaria (AEB), Alejandra Kindelán, admitió desconocer la redacción final. Desde Economía aclararon finalmente que los créditos que se adhieran al plan «no tendrán que ser reclasificados como dudosos», lo que aumenta las posibles adhesiones. Por su parte, la subgobernadora del Banco de España, Margarita Delgado, reconoció que existe riesgo de impagos en determinados bloques de la cartera hipotecaria y resaltó la necesidad de prestar «gran atención» a las hipotecas variables con una elevada carga financiera.
La Autoridad de Defensa del Cliente Financiero sancionará los incumplimientos
Otro de los argumentos que la ministra Calviño esgrimió para defender frente a las críticas la idoneidad de la adhesión voluntaria al pacto hipotecario, fue precisamente la creación de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, un nuevo organismo aprobado en el Consejo de Ministros de ayer —vía proyecto de ley— y que, entre otros cometidos, tendrá competencias para resolver conflictos de buenas prácticas bancarias y capacidad sancionadora cuando se incumplan sus resoluciones.
La vicepresidenta insistió que, una vez que las entidades se adhieran al código de buenas prácticas, estarán obligadas a cumplirlas y por que eso ocurra velará la nueva autoridad independiente.
Centralizará los actuales servicios de reclamaciones del Banco de España, la CNMV y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones. Los usuarios podrán presentar sus reclamaciones ante un único organismo, que atenderá «de forma ágil, en un plazo máximo de 90 días, y gratuitamente». Se financiará con una tasa de 250 euros impuesta a las entidades financieras por cada reclamación admitida y sus resoluciones serán vinculantes hasta un importe reclamado de 20.000 euros.
Las ministras de Podemos cargan contra unas medidas que ven «mejorables»
Las discrepancias en el seno del Gobierno han vuelto a aflorar a cuenta de la aprobación del pacto hipotecario con la banca. Porque mientras que la vicepresidenta Calviño defendía sus bondades, al extender a más potenciales beneficiarios la flexibilización de los créditos, su homóloga de Trabajo, Yolanda Díaz, calificaba de «sustancialmente mejorables» las medidas.
Considera, como la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, o el portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, que el código debía ser obligatorio y no de adhesión voluntaria. Calviño, sin embargo, se defendió alegando que esta fórmula, ya aplicada antes con la banca, daba buenos resultados.