Colas en el Banco de España en A Coruña: «Llevo sin comprar deuda pública desde antes del euro y ahora invierto 200.000»

Ana González Núñez
Ana González A CORUÑA / LA VOZ

ECONOMÍA

Agustín García y Ramón Barro, inversores.
Agustín García y Ramón Barro, inversores. A. G.

Personas de diferentes puntos de Galicia y de fuera de la comunidad acudieron a la ciudad herculina atraídos por la rentabilidad que ofrece el Tesoro

03 feb 2023 . Actualizado a las 12:44 h.

Más de una hora esperaron este jueves algunos de los asistentes —muchos de ellos jubilados— a la cola de la sucursal coruñesa del Banco de España para adquirir deuda pública o informarse sobre el asunto. Al ver la cola formada en el interior del edificio, algunos de los que se habían acercado a la puerta con intención de entrar se dieron la vuelta.

Sin embargo, a otros esta afluencia les pareció insignificante en comparación con la de Madrid. Por eso precisamente se acercó a esta sede Agustín García, que es de Logroño y tiene una casa en Pontevedra. «Es una inversión segura», sostuvo este profesor de Matemáticas jubilado que suele invertir en bolsa y que desde hace más de 20 años no consideraba beneficioso hacerse con letras del Tesoro. «Llevaba sin comprar deuda pública desde que entramos en el euro, porque antes los tipos de interés eran altos, con mucha más rentabilidad, hasta el 12 %. Luego bajaron mucho», explicaba el también licenciado en Economía, que ayer invirtió 200.000 euros y estima que ganará en seis meses 3.500.

Agustín considera que «para los pequeños ahorradores y para la gente mayor es mucho más seguro invertir en deuda pública española que en la bolsa», porque en el mercado bursátil «hay más riesgo y hace falta tener conocimientos». «En internet hay muchas informaciones interesadas», apuntó García, quien siempre que confió en fondos de inversión perdió su dinero.

Desde Mondoñedo acudió al Banco de España Ramón Barro, otro jubilado que compró letras del Tesoro. Invirtió 101.000 euros a 12 meses «porque merece la pena y no hay riesgo». Fue capitán de la Marina Mercante e invierte en deuda pública y en la bolsa «desde hace 40 años» por afición, porque le gusta y le compensa. «Al banco encima a veces le tienes que pagar tú. Aunque le pongas allí un millón de euros no te dan ni un centavo», criticó Barro, quien no aconseja a cualquiera invertir en bolsa por el riesgo que conlleva. «Hay que saber mucho y estar muy bien enterado de la bolsa, si no, lo vas a perder. Hay que ser perro viejo. No se lo recomiendo a nadie que no haya estudiado Economía o algo similar», aseguró.

El Tesoro recibe el doble de peticiones para comprar bonos

El Tesoro Público colocó ayer 6.499 millones de euros en la primera subasta de febrero. En este caso se trató de bonos y obligaciones, sobre los que la demanda se situó en casi 13.700 millones, es decir, más del doble de lo que el Estado ha emitido. El secreto del éxito de las subastas se explica por los intereses que ofrece a este tipo de inversiones, una de las más seguras al tratarse de deuda soberana. En concreto, ayer colocó 2.400 millones de euros en bonos a tres años, con un interés que roza el 3 %, frente al 2,8 % de la subasta anterior. En las obligaciones a cinco años, consiguió vender títulos por valor de 1.611 millones, con una rentabilidad del 2,9 %.