Goirigolzarri asegura que la entidad va bien encaminada para lograr las metas del 2024
31 mar 2023 . Actualizado a las 21:04 h.El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, reclamó ayer que se complete la unión bancaria europea, cuya necesidad han vuelto «a poner de manifiesto» las turbulencias financieras de las últimas semanas. Lo dijo este viernes durante la junta general de accionistas, que se celebró en Valencia, y junto al consejero delegado, Gonzalo Gortázar. Goirigolzarri considera que «sería muy importante acelerar la creación del fondo de garantía de depósitos europeo» como medio para evitar una eventual retroalimentación entre riesgo bancario y riesgo soberano. Lo plantea como respuesta a la volatilidad que ha sufrido el sector bancario en la bolsa en las últimas semanas a causa de la quiebra de Silicon Valley Bank y de los problemas y posterior absorción de Credit Suisse.
Aseguró que, en todo caso, la banca española «está muy bien preparada y tiene una enorme fortaleza para enfrentarse a este tipo de situaciones», a diferencia de la crisis iniciada en el 2008.
Goirigolzarri ve necesario que a medio y largo plazo se tengan en cuenta los retos a los que se enfrenta la economía española. «Siempre he pensado que el punto débil más importante de la economía española es su productividad, y el mayor factor de vulnerabilidad es el desequilibrio de las cuentas públicas», dijo. Y advirtió que España sigue manteniendo ratios de deuda sobre PIB muy elevadas, y un déficit estructural cercano al 4%, que «no se ha conseguido corregir en ningún momento en la última década».
Por otra parte, aseguró el presidente de CaixaBank que los resultados cosechados por la entidad en el ejercicio 2022 permiten pensar que se alcanzarán los objetivos financieros previstos a cierre del 2024. Así, se prevé una rentabilidad sobre recursos propios que supere el 12 %; una mejora de la eficiencia para situarla por debajo del 48 %, y mantener la posición de capital y solvencia, «con el objetivo de generar capital disponible para distribuir 9.000 millones de euros en el período. Aseguró que son objetivos «muy ambiciosos», pero defendió que la «entidad va por buen camino».