Un estudio revela que el 32 % de los españoles aumentó su consumo de marcas blancas tras la pandemia

LA VOZ

ECONOMÍA

EDUARDO PEREZ

El observatorio de la agencia coruñesa BAP&Conde concluye que una de cada dos personas modificó sus hábitos de compra por la inflación

06 mar 2024 . Actualizado a las 12:59 h.

El observatorio de la agencia BAP&Conde, ObserBAPtorio, presentó este miércoles en A Coruña el estudio Consumo en tiempos de inflación, realizado con 845 encuestas a personas que se encargan de hacer las compras en sus hogares. Una de sus principales conclusiones es que uno de cada dos consumidores han cambiado sus hábitos a causa de la subida de los precios. «La inflación se ha convertido en la primera preocupación mundial. La vida está muy influida por nuestra capacidad económica», aseguró la coordinadora del estudio Cristina Varela, que presentó los resultados junto al fundador de la agencia, Miguel Conde-Lobato.

Las entrevistas, realizadas a mayores de 18 años vía online en todo el territorio nacional y en plena subida de precios, revela cambios en los perfiles de consumidores, también en el papel que juegan productos y marcas. El estudio contempla categorías como energía, alimentación y ocio y bienestar. Sobre la expectativa de gasto de los hogares españoles, la mitad de los entrevistados cree que su capacidad de consumo va a seguir igual y el 20 % espera que mejore. Además, el observatorio desvela que las marcas blancas están en máximos históricos en cuanto a nivel de penetración en el mercado, el 32,2 % declara haber aumentado su consumo

Y es que dentro de este desembolso, hay prioridades, pues «el dinero determina bastante nuestras opciones de diversión», indicó Varela, quien añadió que las categorías que se han visto más afectadas son las no básicas o no esenciales. Así, el análisis refleja que entre el 28 % y el 46 % consumen menos ocio y productos vinculados al bienestar y a la sostenibilidad. «Una de las cosas que nos ha llamado la atención es que no renunciamos al streaming, pues las plataformas digitales se están convirtiendo en ese nuevo lujo asequible», subrayó la coordinadora, pues casi el 30 % de las personas consultadas gasta más que antes en datos móviles e internet.

Según el informe, seis de cada diez personas siguen comprando productos frescos, es decir, no procesados, a pesar de ser de los que más se han encarecido en los últimos tiempos. Además, uno de cada dos consideran que van a incrementar su consumo de este tipo de alimentos. En el caso de las conservas, mantienen el nivel de consumo siete de cada diez, el mismo porcentaje que con otros alimentos básicos como la leche o el pan.

Sin embargo, la proporción de abandono de los frescos (por encima del 22 %) supera al de los congelados y conservas. «Ambos pueden ser una alternativa más práctica y económica, y representan una tendencia a seguir en alimentación para uno de cada cuatro consumidores, por detrás de los productos frescos, locales y low-cost», puntualizó Varela. 

Por otra parte, este trabajo abordó también la forma de las personas de afrontar esta situación de manera psicológica y revela que ha aumentado el nivel de frustración, pues uno de cada dos entrevistados se sienten decepcionados por no cumplir sus expectativas.