La opa de BBVA sobre Sabadell abona la ansiada integración bancaria en la Unión Europea

Olatz Hernández BRUSELAS / COLPISA

ECONOMÍA

CAPOTILLO

-El BCE, la Comisión y líderes como Macron apuestan por las fusiones transnacionales en una Unión Bancaria todavía incompleta

02 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La opa hostil de BBVA sobre Sabadell ha vuelto a poner encima de la mesa las fusiones bancarias que el BCE lleva años reclamando. Su vicepresidente, Luis de Guindos, ha destacado que estas operaciones podrían fortalecer la salud del sistema bancario. Estas transacciones, sin embargo, chocan con las barreras de la todavía incompleta Unión Bancaria, cuyo tercer pilar (que incluye el sistema europeo de garantía de depósitos) permanece en negociaciones desde hace una década.

Actualmente hay más de 4.500 bancos activos en la UE, pequeños y medianos en su mayoría. Los grandes, sin embargo, cuentan con una menor actividad en otros Estados miembros. Esto va en detrimento de la competitividad europea, según el presidente francés Emmanuel Macron, que hace apenas dos semanas se mostró abierto a que un gran banco francés se fusionara con un rival europeo para «profundizar en la integración financiera», algo que considera clave para la prosperidad del bloque. El profesor del Instituto Internacional Peterson y miembro del think tank Bruegel, Nicolas Véron, señala que «hace 10 años el sector bancario estaba sobrecargado de entidades. Ahora, la zona euro tiene que ir hacia la consolidación y las fusiones transnacionales», apunta.

Fuentes del Ejecutivo comunitario coinciden en que las transfronterizas «podrían mejorar la diversificación geográfica y generar modelos de negocio más eficientes», lo que permitiría a las entidades europeas estar «mejor preparadas» para competir con sus homólogos internacionales. En ese proceso será esencial completar la Unión Bancaria. «Lograrlo eliminaría las barreras para las fusiones transfronterizas y la UE tendría un mercado financiero más integrado», apunta el experto de Bruegel. Por el momento y tras el último intento por reavivar el debate en junio del 2022, parece que no hay «intención política» para su finalización. «Está claro que no completarla va en detrimento de la estabilidad financiera y la competitividad de la UE», señala Véron, que no descarta que el debate se reavive en algún momento.

Aunque la presidencia belga del Consejo Europeo reconoce que las negociaciones han llegado a un punto en el que «es muy difícil» que se dé un progreso real a corto plazo, el economista de Bruegel apunta que las declaraciones de Macron son indicadores del contexto geopolítico actual, provocado por la inestabilidad en Oriente Próximo. «Los líderes han entendido la urgencia de completar la Unión Bancaria. Mantener la fragmentación de los mercados con las fronteras nacionales va en detrimento de los intereses europeos», subraya.

Gigantes bancarios

Pero con la creación de bancos transnacionales, ¿existe el peligro de crear gigantes inmanejables? El experto reconoce que es un debate complicado: «La experiencia nos ha mostrado que cualquier banco es demasiado importante como para fallar, ya que cuando ha habido problemas, las pequeñas entidades también han recibido fondos públicos. Pero en el caso de un gran banco transnacional, si hay una buena supervisión que permita tomar acciones pronto en caso de problemas, no debería afectar».

Fuentes de la Comisión Europea corroboran que las reformas tras la crisis financiera y la implementación de los dos primeros pilares de la Unión Bancaria «han contribuido a aumentar la resiliencia del sector» y a capear crisis como la pandemia y la inestabilidad tras la caída del Sillicon Valley Bank y el rescate de la suiza Credit Suisse en el 2023. Así las cosas, una gran entidad «enfrentaría requisitos más estrictos de supervisión y para que pueda resolverse en caso de fallo, con mayor capacidad interna de absorción de pérdidas y fuertes poderes de resolución por parte de las autoridades».