El recibo de la luz tendrá otra rebaja del IVA ante un verano con precios más caros

J. M. Camarero MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

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Foto de archivo. La Voz

A partir del 1 de julio, la factura incorporará novedades condicionadas por los aumentos de las últimas semanas

24 jun 2024 . Actualizado a las 14:25 h.

El recibo de la luz digerirá cambios importantes en apenas una semana como consecuencia de la variabilidad de precios eléctricos de los dos últimos años y los movimientos generados en las centrales en las últimas semanas. Una buena parte de los recibos cambiarán a partir del 1 de julio tanto en lo relativo a los impuestos como en lo que tiene que ver con la consolidación del cálculo de la tarifa regulada (la denominada PVPC), que abonan unos ocho millones de hogares.

En primer lugar, el tipo impositivo del IVA bajará desde el 21 % actual al 10 %, tal y como marca la normativa en vigor. Lo hará si el coste medio de generación eléctrica se sitúa por encima de los 45 euros el MWh. Y, a falta de una semana para que termine este mes, la media ya es superior a los 53 euros el MWh, según los datos del operador ibérico OMIE.

Los cambios del IVA en la factura de la luz vienen siendo la tónica habitual desde que el pasado mes de enero entró en vigor el nuevo decreto anticrisis en el que se establecía un gravamen (21 o 10 %) en función de la evolución de los precios eléctricos. Y llevamos un semestre en el que la volatilidad del mercado energético es más altisonante que nunca.

En los meses de marzo, abril y mayo, con unos precios de la electricidad históricamente bajos, impulsados por la fuerte presencia de las renovables en la generación, y especialmente de la hidráulica, llevaron a la aplicación de un IVA del 21 %. De esta manera, se regresará a la factura de luz que se dio en enero, con la diferencia de que el impuesto eléctrico subirá al 5,11 %, volviendo a su valor habitual, con lo que, para una factura con 190 kWh consumidos al mes a 0,14 euros el kWh, pasará de costar 50,89 euros —con IVA al 21 % e impuesto eléctrico al 3,8 %— a 46,84 euros —con IVA al 10 % e impuesto eléctrico al 5,11 %—, según datos recopilados por el mercado eléctrico.

En el sector energético ya advertían de que el IVA de la electricidad «va a ser variable, impredecible y con reglas complejas de entender», y que afectará a las facturas de todos los consumidores, por lo que piden la revisión de este mecanismo de IVA «dependiente de variables ajenas a la mayoría de los consumidores».

Un trimestre al alza

De hecho, lo más probable es que, al menos durante el verano, el IVA de la luz doméstica se mantenga en el tipo reducido del 10 % ante las previsiones de precios que se están manejando en estos momentos. Los futuros apuntan a una media de 75 euros por MWh para julio, verán un retorno del IVA al valor reducido del 10 % para todas las facturas que se emitan durante el mes de julio. Además, esos indicadores de mercado anticipan un precio medio de generación cercano a los 80 euros por MWh para el tercer trimestre del año (julio, agosto y septiembre) y una media de 67 euros por MWh para todo el 2024. Es decir, en la mayoría de los casos, costes superiores al límite de 45 euros por MWh establecido por el Gobierno para cambiar el IVA del 10 al 21 %, o viceversa.

Cuando se aplique definitivamente esta medida sobre los recibos eléctricos, las arcas del Estado volverán a sufrir una sangría por la merma de ingresos tributarios. Aunque no será tan alta como la de 2.500 millones de euros que Hacienda dejó de ingresar en el peor momento de la crisis del 2021 y el 2022.

Por otra parte, sigue en vigor la nueva tarifa regulada, mediante la cual el 25 % de los precios que incluyen esos contratos ya se encuentran contratados a futuro. Es decir, son estables, aunque al mismo tiempo, no se han beneficiado de las bajadas registradas en los últimos meses, ni les perjudicarán las previsibles subidas de las próximas semanas.

La parte proporcional de precios fijos del PVPC pasará a representar el 40 % del coste en 2025 y alcanzarán ya el 55 % a partir de 2026, mientras que la indexación al contado irá perdiendo así su peso pasando del 75 % de este ejercicio al 45 % al final de toda la reforma.