El Gobierno condiciona las ayudas públicas de Altri al respeto del medio ambiente

La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, reiteró este jueves en el Senado que su departamento solo autorizará ayudas públicas a la planta de fibras textiles de Altri en Palas de Rei si la compañía certifica que el proyecto no dañará de forma significativa el medio ambiente.

Así se lo hizo saber a la senadora del Bloque Nacionalista Galego (BNG), Carme da Silva, quien instó a Aagesen a decir que «no habrá recursos públicos para este despropósito ambiental», que supone «una política industrial colonial de explotación de recursos energéticos, forestales, ambientales y agredir al territorio de forma irreversible para el futuro».

La ministra recordó que cualquier empresa que solicite dinero del fondo de recuperación para un proyecto —la compañía lusa solicita 250 millones de euros para acompañar sus inversiones— «tienen que cumplir con el principio de no dañar significativamente el medio ambiente, lo que llamamos el criterio DNSH».

Altri subraya que el proyecto de Palas requiere un 25 % de fondos públicos

La Voz

«Hasta ahora, y vamos a seguir haciéndolo, en cualquier ayuda que sea apoyada por este ministerio o por otro, se tiene que cumplir con este principio. Vamos a velar por ese cumplimiento, que no le quepa la menor duda», reiteró a Da Silva. «En caso de dar ayudas tendríamos que mirar que se cumple con ese principio de no daño significativo», incidió tras las críticas de la senadora nacionalista al proyecto, que considera un «despropósito ambiental».

Hace solo cinco días que Augas de Galicia divulgó sus conclusiones sobre la planta de Greenfiber (la filial de Altri). El organismo considera que su despliegue es «compatible con los objetivos medioambientales» y no causará «impactos significativos» en el río Ulla y el embalse de Portodemouros.

La Xunta ya tiene listos 24 de sus 27 informes para la tramitación ambiental del proyecto.

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