Telefónica perdió 1.731 millones en el primer trimestre por la venta de filiales en Argentina y Perú
ECONOMÍA
Los ingresos de la operadora dirigida por Marc Murtra cayeron un 2,9 %, aunque confirma que repartirá un dividendo de 0,3 euros por acción
14 may 2025 . Actualizado a las 14:08 h.Telefónica registró unas pérdidas netas de 1.731 millones de euros en el primer trimestre del 2025 debido a las minusvalías contables derivadas de la venta de sus filiales en Argentina y en Perú, aunque la operadora ha mantenido sus previsiones para el actual ejercicio, en el que repartirá un dividendo de 0,3 euros por acción. Esto se debe a que el beneficio neto de sus operaciones continuadas —los negocios que siguen dentro del grupo— se ha situado en 427 millones de euros hasta marzo, lo que supone un descenso del 26 % interanual frente a los 576 millones que se habrían obtenido en el primer trimestre de 2024, descontando también los negocios argentino y peruano.
El repliegue de Telefónica en América del Sur se traduce en una de las mayores pérdidas trimestrales de la historia de la compañía dirigida por Marc Murtra, superando incluso los números rojos de 1.003 millones de euros a los que tuvo que hacer frente en el último trimestre del 2024, también por la depreciación de activos en América Latina y de su unidad de activos digitales. La merma, en todo caso, es inferior a los 2.154 millones que perdió la operadora en el último trimestre de 2023.
La venta de la filial de Telefónica en Argentina, una operación que se firmó y se cerró el pasado 24 de febrero, supuso un impacto en las cuentas de la operadora de alrededor de 1.200 millones de euros y se ha computado como pérdidas en sus resultados del primer trimestre debido, sobre todo, a la reclasificación de las diferencias de conversión negativas acumuladas por la subsidiaria.
En lo que respecta a la filial de Perú, que se encuentra en concurso de acreedores y cerró el 2024 con pérdidas de 1.240 millones de euros, la venta se materializó el pasado 13 de abril por 3,7 millones de soles peruanos (en torno a 900.000 euros), aunque la compañía matriz ya lo computa en el primer trimestre, y ha tenido un impacto contable de alrededor de 500 millones de euros. A las desinversiones en América se suma también la venta de la filial en Colombia por unos 368 millones de euros, aunque su impacto todavía no se traslada a los resultados del primer trimestre debido a que todavía no está cerrada.
Descontando las divisiones de Telefónica en Argentina y Perú, consideradas «operaciones discontinuadas», el beneficio neto de las operaciones continuadas de la operadora, las que permanecen dentro de su perímetro de negocio, fue de 427 millones de euros en los primeros tres meses del año.
El grupo ha registrado una facturación orgánica de 9.221 millones de euros en los tres primeros meses del año, un 1,3 % más en términos interanuales debido al aumento de los ingresos en el segmento de empresas (con un crecimiento del 5,4 %) y residencial (1,8%), si bien, de forma reportada, las ventas han bajado un 2,9 % debido al efecto de los tipos de cambio.
En tanto, el resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado se ha situado en 3.014 millones de euros y ha registrado un incremento orgánico del 0,6 %, si bien ha descendido un 4,2 % en la comparativa interanual en términos reportados. Y esto se debe también a los efectos cambiarios de las divisas. De este modo, el margen de Ebitda ajustado sobre las ventas terminó el trimestre en el 32,7 %, frente al 33,1 % de hace un año.
Un 2,8 % menos de inversión
En lo que concierne a la inversión de Telefónica, en los tres primeros meses del actual ejercicio se situó en 938 millones de euros, un 2,8 % menos que en el primer trimestre de 2024 de manera orgánica y un 6,7 % menos en términos reportados, por lo que la ratio de inversión sobre ingresos se ha situado en el 10,1 %. Además, la caja operativa de Telefónica ha alcanzado los 1.412 millones de euros, un 0,6 % más de forma orgánica y en línea con lo previsto para el conjunto del ejercicio, mientras que en términos reportados ha caído un 4,9 %, nuevamente por el impacto de las divisas.
El consejero delegado de la compañía, Emilio Gayo, puso de relieve que los resultados «confirman nuestras expectativas», y se mostró convencido de que los datos mejorarán a lo largo del año, confirmando las previsiones iniciales fijadas para el 2025. Es por ello que confirmó el dividendo de 0,3 euros por título para el 2025, el cual se abonará, de nuevo, en dos tramos: el primero, de de 0,15 euros por acción, se pagará el próximo 18 de diciembre, mientras que el segundo, también de 0,15 euros por título, se abonará en junio de 2026.