Galicia destruyó 240 empleos al día en el peor septiembre para el empleo desde el covid
ECONOMÍA

En el conjunto de España se crearon casi 31.500 puestos netos, al compensar las altas en educación por el nuevo curso las bajas en la hostelería y el comercio
02 oct 2025 . Actualizado a las 19:20 h.Septiembre es un mes de contrastes, también en el mercado laboral. Mientras negocios de hostelería y comercios bajan la persiana en localidades costeras por el fin de la temporada alta estival, los centros educativos vuelven a bullir con la incorporación de alumnos y profesores. En el conjunto del país, el tirón de las altas en el sector de la educación, con 64.000 nuevos empleos netos el mes pasado, fue suficiente para, sumado a otros sectores como el de las actividades administrativas (24.000 afiliados más) y las profesionales y técnicas (10.000 altas), compensar el efecto negativo del fin de la campaña turística, que destruyó 80.000 puestos entre el comercio (45.500) y la hostelería (35.500).
En total, la Seguridad Social ganó 31.462 afiliados netos el mes pasado, más del triple que en septiembre del 2024, lo que elevó el total de cotizantes medios a los 21.697.665, medio millón más de los que había en el mismo mes del año anterior. Esto se tradujo en un descenso del paro registrado en 4.846 personas, dejando el total de inscritos en las listas del Servicio Público de Empleo (SEPE) en los 2.421.665. Un retroceso inusual en un mes en el que, salvando los dos primeros años de la pandemia, el paro no se reducía desde el pinchazo de la burbuja inmobiliaria.
El panorama general en el conjunto de España no se replicó en Galicia, donde el balance del mercado laboral se tiñó de rojo en septiembre, con la pérdida de 7.205 afiliados netos, a razón de unos 240 empleos menos al día, el mayor retroceso en el noveno mes del año desde el 2019, el ejercicio previo al estallido de la pandemia. Pese a la caída, la comunidad se mantuvo por encima de la barrera de los 1,1 millones de cotizantes (1.104.002) por cuarto mes consecutivo.
El descenso de la afiliación trajo aparejado un alza del paro registrado, que aumentó en casi 3.400 personas (y eso a pesar de que los fijos discontinuos que dejaron de trabajar no engrosan esa estadística) hasta un total de 113.085.
Si se analiza por provincias, la de Pontevedra (la más turística) es la que más acusó la destrucción de empleo en septiembre, con la pérdida de 2.944 cotizantes, aunque en términos relativos la mayor caída es la de Lugo, que perdió más de uno de cada cien afiliados (1.457, un 1,12 %, frente al 0,75 % de Pontevedra). A distancia se sitúan A Coruña, donde el fin de la temporada estival destruyó 2.606 empleos (un 0,54 % del total) y Ourense, la menos afectada, con unas 200 bajas netas (el 0,18 %).
31 contratos por nuevo afiliado
Aunque las cifras macro del mercado laboral son positivas, el análisis detallado de las tendencias muestra que persisten retos, como el de la temporalidad y el de la alta rotación, como destacan desde InfoJobs. Desde la plataforma online de empleo ponen el acento en que «en los últimos doce meses, por cada nuevo afiliado se han firmado 31 contratos iniciales». Una alta tasa de rotación que, destacan, no se ha reducido con la entrada en vigor de la última reforma laboral, en el año 2022, ya que en septiembre de ese año la ratio era de 29 contratos por cada nuevo cotizante que ganaba la Seguridad Social, ligeramente inferior a la actual.
«Sin embargo, si se comparan con las cifras previas a la pandemia, sí que se puede ver un panorama diferente. En enero del 2020, por ejemplo, se firmaron 66 contratos por cada nuevo afiliado, tomando siempre como referencia los últimos doce meses. Y en enero del 2019 esta cifra fue significativamente más baja, aunque superior a la actual: entonces se habían firmado 41 contratos por cada nueva alta laboral en la Seguridad Social», destacan.
También medio vacío ven el vaso las patronales CEOE y Cepyme, que advierten de que las pequeñas empresas y las microempresas siguen sufriendo a pesar de la mejora de los datos de paro y afiliación, que atribuyen «a la inercia de la economía». Un escenario de crecimiento que contrastan con el de las pymes, afectadas por su mayor sensibilidad al aumento de costes y «la falta de certidumbre y seguridad jurídica». Según la organización que dirige Antonio Garamendi, la gran empresa es la que está compensando la reducción de empleo en las microempresas, cuyo peso ha descendido del 21,6 % del 2019 al 18,55 %.
Subir el salario mínimo
Los sindicatos, por su parte, celebraron el «momento histórico» que atraviesa el mercado laboral, que a juicio de UGT confirma que la subida de los salarios «fortalece y mejora sustancialmente el comportamiento del mercado de trabajo», por lo que reclamaron al Gobierno una subida rotunda del salario mínimo de cara al próximo ejercicio.