La tortuosa opa sobre el Sabadell aboca al Gobierno a cambios regulatorios

a. balseiro / C. alba MADRID / LA VOZ / COLPISA

ECONOMÍA

Enric Fontcuberta | EFE

La CNMV se ofrece a asesorar en la reforma la ley, mientras Economía acelera la trasposición de la directiva que refuerza al Banco de España en las fusiones

22 oct 2025 . Actualizado a las 12:23 h.

Aprender de los fracasos. Después de un tortuoso proceso de más de 17 meses, desde que el pasado jueves se conociese el fiasco de la opa hostil lanzada por BBVA sobre el Banco Sabadell no han dejado de aumentar las voces que piden modificaciones en la normativa que regula estos procedimientos. Se trata de acotar —y acortar— plazos, además de clarificar las intervenciones, para que no vuelvan a producirse los insólitos episodios que trufaron esta opa, incluyendo la intervención del Ejecutivo, que llegó a convocar una consulta pública (no vinculante) antes de entorpecer con más obstáculos una potencial fusión. La actuación del Gobierno acabó provocando la apertura de un expediente por parte de Bruselas.

A toro pasado, los agujeros de la ley de opas son más que evidentes, y este martes tanto el gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, como el responsable de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Carlos San Basilio, aprovecharon su participación en diferentes foros financieros para poner el foco en la necesidad de «mejorar la redacción» de la polémica normativa, algo que le corresponde al Ejecutivo.

«Tenemos que repensar un poco todo el marco en el que nos desenvolvemos», aseveró Escrivá, tras calificar de «demasiado largo» el proceso de la opa de BBVA sobre Sabadell. No se refirió, sin embargo, al papel que podría tener el Banco de España en un futuro ante fusiones bancarias, ya que el Ministerio de Economía ha confirmado que está acelerando el proceso para trasponer una directiva europea de requisitos de capital para los bancos (la CDR6), que, entre otras cosas, reforzará el papel del supervisor y también del Banco Central Europeo (BCE) a la hora de decidir sobre fusiones de entidades significativas, como habría sido el caso de BBVA y Sabadell.

«Los supervisores han de poseer todas las facultades necesarias para ejercer sus cometidos respecto de las distintas operaciones que efectúen los entes supervisados», apunta la norma.

En teoría, esto implicaría que el Ministerio de Economía pierda su poder para vetar fusiones, como hizo en el caso de BBVA, abriendo una brecha con Bruselas. Sin embargo, fuentes conocedoras explican que hay distintas interpretaciones de la normativa, que podrían permitir al Gobierno cierto margen para mantener su competencia.

Fuentes de Economía explican que aún se está analizando el texto definitivo, que esperan tener aprobado próximamente para cumplir con el plazo de la trasposición, que expira el 11 de enero del año 2026. Recuerdan, además, que el Banco de España ya interviene en cualquier proceso de opa bancaria, aunque las fuentes jurídicas consultadas señalan que el espíritu de la norma es remar a favor de una mayor participación de los supervisores en detrimento de los gobiernos.

Habrá que esperar para comprobar la interpretación del Ejecutivo, que tendrá que llevar la norma al Consejo de Ministros antes de que termine el año. Para entonces, se espera que Economía empiece al menos a valorar otros cambios regulatorios, como el de una actualización de la ley de opas, que ha demostrado ser insuficiente para abordar procesos como el vivido el último año y medio con BBVA y Sabadell.

Contra la incertidumbre

No solo se trata de acortar los plazos para evitar la incertidumbre entre los accionistas. La opa ha terminado sin que el mercado sepa los criterios que habrían de emplearse para establecer un precio equitativo en caso de una segunda opa. Un movimiento que nunca antes había sucedido, pero que podría repetirse en el futuro.

La CNMV era quien debía establecer esos criterios. Pero el fracaso de la operación la salvó de hacerlo y la presión recae ahora en Economía que es, a juicio de la institución presidida por San Basilio, quien tiene la competencia para mejorar la norma. San Basilio defendió la actuación de la CNMV en el proceso, escudándose en que no fijó el criterio para no añadir más confusión, pero ofreció la ayuda del organismo si el Gobierno decide reformar la ley de opas, como cree que sería bueno hacer.

 Oliu: «En los últimos días estábamos convencidos de que iba a haber una segunda opa»

«Perdimos el tiempo durante tres días en los que estábamos convencidos de que iba a haber una segunda opa que luego no pasó». Con esa contundencia se manifestó este martes el presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, al analizar el proceso de la oferta fallida de BBVA sobre la entidad.

Durante su participación en el foro World in Progress en Barcelona, Oliu reconoció que en la última semana del proceso, la entidad consideraba que Carlos Torres sí superaría el umbral del 30 %, por lo que la sorpresa fue mayúscula cuando el equipo directivo conoció que se quedó en el 25 %.