














Alfonso Rueda agradeció el esfuerzo de las familias en la conciliación. Este martes solo el 2,5 % del alumnado fue al colegio
30 abr 2025 . Actualizado a las 06:31 h.Las aulas gallegas vivieron este martes una jornada singular: abiertas para los alumnos, solo el 2,5 % acudió a clase, según datos de la Consellería de Presidencia, Xustiza e Deportes, que elevó hasta el 3,5 % el porcentaje de alumnos presentes en las escuelas infantiles públicas. El motivo, el apagón del lunes aconsejó suspender la actividad lectiva porque durante la tarde no estaba claro que se pudiese garantizar el abastecimiento de combustible para los cientos de autobuses escolares que tenían que llevar a los alumnos y devolverlos a casa.
Hoy miércoles, en cambio, la normalidad debería ser la tónica general, ya que no quedan centros en Galicia sin suministro. Lo anunció ayer por la tarde el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, quien aprovechó la ocasión para agradecer a las familias y a los profesionales educativos su esfuerzo para que todo funcionase correctamente y solo se utilizasen los servicios estrictamente necesarios.
Los datos oficiales de este martes indican que del total de 1.076 centros escolares públicos, solo hubo incidencias en menos de un centenar, la mayoría por falta de suministro eléctrico ya que este no volvió al mismo tiempo en toda Galicia. En otros, hubo confusión en el equipo directivo sobre la posibilidad de aceptar o no a estudiantes. Todos tenían claro que no habría actividad lectiva, pero ya era más difícil saber si podían abrir sus puertas a los alumnos o no. La orden de la Xunta de la tarde del lunes era que no, pero como el Gobierno central asumió la gestión de la crisis durante la tarde-noche, las cosas cambiaron y el Ministerio de Educación insistió en que colegios y escuelas infantiles tenían que permanecer abiertos a las familias que necesitasen del espacio para la conciliación.
La actualización de la aplicación Abalar y de la propia web de la Consellería provocó más de un malentendido. Fueron finalmente los servicios de Inspección Educativa los que estuvieron en contacto con los equipos directivos durante toda la mañana para facilitar una progresiva vuelta a la normalidad.
Puertas abiertas
En algunos centros asumieron desde el primer momento la necesidad de abrir sus puertas al alumnado. Ocurrió por ejemplo en el IES Xelmírez I, de Santiago, que no tuvo alumnos, mientras que en el CEIP Pio XII, en la misma ciudad, acudieron unos cincuenta estudiantes de los 650 que tiene el centro. En Ferrol, por su parte, el Compañía de María recibió a 51 de sus 484 estudiantes, y en el CEIP Cruceiro de Canido, a 9 de 324, mientras que en al Isaac Peral entraron solo 6.
En Ourense varios colegios concertados abrieron sus puertas, como Maristas, Salesianos o Franciscanas, donde acudieron menos de un centenar de familias. En A Coruña, los pocos alumnos que fueron a los institutos estaban concentrados en las bibliotecas y hubo colegios concertados, como Dominicos, que hasta ofrecían comedor y actividades extraescolares.
Otra cosa fueron las escuelas infantiles, que masivamente permanecieron cerradas, al menos en las primeras horas de la mañana, incluso las públicas. En A Coruña las municipales exhibían una orden del concello que les permitía no abrir.
En este día de confusión, las familias de los alumnos del IES Neira Vilas, en Oleiros, agradecieron que el centro educativo se pusiese en contacto con todos y cada uno de los afectados de 2.º de bachillerato para avisarles de que la selectividad francesa (el centro tiene el doble bachillerato) se realizaría con normalidad este martes. Es una prueba que se hace a la vez a nivel estatal y los estudiantes pudieron realizarla.
Pero hubo mucha confusión por momentos, incluso para los profesores: «Eu son docente e ofrecinme ir a traballar para axudar ás familias a conciliar. Non temos ningunha indicación. Na nosa app a última mensaxe é a de que non se ía abrir. A directora do centro estivo ata as dúas da mañá agardando por unha indicación, e nada. Teño un amigo ao que o inspector de Educación díxolle que non se abría», apuntó.
De hecho, tanto Ana Pontón, la líder del BNG, como el sindicato nacionalista (CIG) criticaron las decisiones de la Xunta sobre los colegios, que resultaron «confusas e contradictorias». Pontón afirmó que el cambio de parecer durante la noche causó «máis dificultades ás familias a hora de poder volver á normalidade».