Solo 22 alcaldes urbanos superaron el 60 % de los votos, como aspira Caballero
ELECCIONES 2020
El récord lo mantiene desde 1983 el alcalde de Parla: sumó tres de cada cuatro apoyos
18 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Diez convocatorias de elecciones municipales han pasado desde la restauración de la democracia, y tan solo 22 candidatos de las 63 ciudades de España con más de 100.000 habitantes han conseguido hacerse con más del 60 % de los votos emitidos por sus conciudadanos. Y en un escenario de tanta atomización, con la irrupción de nuevos partidos que han roto con el mapa tradicional, ampliar ese club parece algo imposible. O no.
Abel Caballero aspira a engrosar esa lista de superalcaldes que desde 1983 lidera su compañero de partido Francisco González Fernández, alcalde de Parla (128.256 habitantes tiene esa localidad madrileña) en los dos primeros mandatos y que llegó a convencer al 77,01 % de los votantes.
El alcalde de Vigo ha llegado en el tracking electoral diario de Sondaxe para La Voz a atraer al 68 % en intención de voto de los encuestados (64 % en el del día de hoy), porcentaje que se sitúa en el horizonte que el propio regidor estima que logrará y que se traduciría en 19 de los 27 concejales de la corporación. Por encima de ese nivel solo se han situado desde 1979 seis de los 630 alcaldes elegidos desde entonces en las urbes del país. Además de González Fernández han superado esa marca su sucesor en el Ayuntamiento de Parla Tomás Gómez, que en el 2003 consiguió el 75,3 % de las papeletas y cuatro años más tarde otro 74,3 %. También en el entonces conocido como cinturón rojo de Madrid, Ramón Espinar conseguía igualmente con el PSOE el 69,9 % en 1983 en Leganés (188.425 habitantes); ese mismo año, en Móstoles (207.095) lo alcanzó el socialista Bartolomé González con un 69,2 %. Y en el 2011 en Torrejón (129.729 vecinos) lo alcanzó Pedro Manuel Rollán: un 68,5 % de las papeletas emitidas.
Llegar ahora, en unas municipales en el 2019 a un nivel tan alto de confianza electoral es más difícil que en mandatos anteriores, pues la diversificación de opciones políticas con la ruptura del bipartidismo (varias mareas municipalistas, agrupaciones locales, Ciudadanos... ) se traduce en una mayor atomización de las corporaciones de la mayoría de las grandes ciudades. En las elecciones municipales del 2015, de hecho, en ningún ayuntamiento urbano se consiguió superar la barrera del 60 % de los votos por parte de un candidato a alcalde. Solo había ocurrido en los comicios de 1979, en el que la explosión de siglas llenó de candidaturas diversas los nuevos ayuntamientos democráticos. En 1983, en cambio, hubo hasta trece mayorías absolutas sustentadas por más del 60 % de los votos, todas ellas firmadas por políticos del PSOE.
La dificultad para conseguir un resultado electoral masivo en las grandes urbes queda probado por el hecho de que solo en tres ciudades con más habitantes que Vigo se han dado casos en los que dos de cada tres electores votasen lo mismo. Lo consiguió Pedro Aparicio en Málaga en 1983 con el 63,30 % de los votos y 21 de los 31 concejales de la corporación; José luis Lassaletta el mismo año en Alicante con un 61,6; y hasta tres veces lo logró entre el 2003 y el 2011 en Murcia el candidato del PP Miguel Ángel Cámara.
Otros nombres conocidos que han conseguido un respaldo masivo en urbes en su momento son los de Jesús Gil, en Marbella en el 91 y en el 95 con el 65 % de los votos; Gabino de Lorenzo en Oviedo en 1995, con un 62,1 %, o la también popular Teófila Martínez en Cádiz cuatro años más tarde, con otro 62 %.
En corporaciones de 27 ediles como la de Vigo, solo se han atribuido al mismo partido 20 representantes -como estima que logrará Caballero y le ha llegado a dar la encuesta de Sondaxe- en Móstoles, Leganés y Huelva.
En la Galicia urbana el récord lo mantiene desde 1991 Francisco Vázquez: consiguió entonces con el PSOE el 59,2 % de los votos emitidos y 18 concejales de 27, uno más de los que hace cuatro años sumó en Vigo Caballero, cuando logró el 51,8 %.