El PSOE resiste, pero el derrumbe de Unidas Podemos le resta opciones
30 may 2023 . Actualizado a las 09:24 h.Los resultados de las elecciones municipales y autonómicas dejaron un balance nefasto para los partidos de izquierdas y esperanzador para el Partido Popular, en mayor medida, pero también para Vox, que será la llave de gobierno de los populares en muchos consistorios y, previsiblemente, en seis autonomías (Aragón, Comunidad Valenciana, Extremadura, Cantabria, Islas Baleares y Región de Murcia).
Extrapolar los resultados de las municipales a unas hipotéticas generales, que pasarán a ser una realidad el próximo 23 de julio, es complicado por la amalgama de diferencias entre unos y otros comicios.
Pp y vox
Resurrección agridulce.
Si los votos en las municipales se volcaran en clave nacional —y bajo el sistema D'Hondt— el Partido Popular sumaría 143 escaños, 54 diputados más que en los últimos comicios. Su esperable socio de gobierno, Vox, contaría con 14 asientos en el Congreso, una cifra considerablemente lejos de los 52 con los que cuenta actualmente la formación de Abascal. Es la mayor paradoja de este método de estimación, ya que Vox triplicó su número de concejales el 28M. En base a estos cálculos, Ciudadanos desaparecería del hemiciclo y perdería sus diez representantes.
Un socio a la deriva
El PSOE, pese al derrumbe de las municipales, no solo mantendría sus diputados, sino que esta estimación le otorga un parlamentario más. Sus problemas para formar gobierno están en su socio a su izquierda. La suma de Unidas Podemos y Más País (englobando varias formaciones locales en este segmento) suman 13 escaños, a falta de comprobar la incidencia que tendría el proyecto Sumar, liderado por la actual titular de Trabajo, Yolanda Díaz. La formación morada está lejos de los 35 diputados que logró en el 2019 y que, a la postre, le valieron para entrar en el Ejecutivo.
bILDU, BNG Y COMPROMÍS
Gran crecimiento
Uno de los partidos que más crece en términos proporcionales es Bildu, que lograría nueve escaños, el mejor resultado de la formación de Arnaldo Otegi. El PNV también ganaría fuerza y sumaría un representante más.
Otros multiplican por cuatro su influencia en el Congreso, como Compromís, que se presentó como Acord per Guanyar a los comicios del domingo, y el BNG. Gallegos y valencianos pasarían de uno a cuatro diputados.
El panorama dibujado por estas estimaciones dejan un escenario en el que los pactos deberán estar a la orden del día. El puzle es complejo para los dos bloques, por lo que en el horizonte también se vislumbraría la convocatoria de unos nuevos comicios.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, asumió como propio el batacazo en las elecciones. El PSOE abandonará siete gobiernos autonómicos y, además, el PP gobernará en 30 de las 52 capitales de provincia, entre ellas, algunos bastiones de Ferraz como Valencia y Sevilla. A tenor de estas estimaciones, aplacar el descenso de intención de voto al PSOE o espabilar a su socio de gobierno —sea Sumar o Unidas Podemos—, son algunos posibles motivos de Sánchez que hayan propiciado su decisión de adelantar las elecciones generales.