El robo que sufrió en su casa de Barcelona ha tenido consecuencias psicológicas para los hijos de Pierre-Emerick Aubameyang
08 ene 2025 . Actualizado a las 11:25 h.Aunque Pierre-Emerick Aubameyang estuvo tan solo seis meses en el Barcelona, su paso por el conjunto azulgrana estuvo marcado por el robo con violencia que sufrió en su casa. Este desagradable episodio, que ahora ha tenido a bien rememorar el delantero del Al-Qadisiyah, tuvo lugar en agosto del 2022 y desde entonces sus hijos no han querido regresar a la casa que tiene en la Ciudad Condal.
Recordando dicho robo, Pierre-Emerick Aubameyang contó en The Athletic: «Mi hijo mayor vino corriendo y me dijo: 'Papá, hay unos tipos en la casa'». Haciendo alusión a los encapuchados, señaló: «Entraron desde fuera, donde mi mujer estaba fumando con mi prima y su novio. Se llevaron al novio de mi prima y entraron en la casa. Mi mujer gritaba. Tenían una pistola»
Pierre-Emerick Aubameyang, por su parte, cogió «una botella grande» con la intención de plantar cara a los asaltantes. «Ahí fue cuando les vi, eran cuatro o cinco. Uno de ellos tenía una pistola y me dijo: 'Baja'. Yo le dije: 'No, no, dime lo que quieres'». Fue entonces cuando, ante la negativa del futbolista del Barcelona a sentarse, uno de los atracadores empezó a golpearle.
Tras ver como se llevaban a sus hijos y a su cuñada, Pierre-Emerick Aubameyang recapacitó: «Si haces algo mal, les puede pasar algo a ellos. Les dí lo que pedían».
Las consecuencias psicológicas que ha tenido para los hijos de Aubameyang el robo que sufrió en Barcelona
Sobre las consecuencias psicológicas que ha tenido para sus hijos el robo que sufrió en Barcelona, comentó: «Después de eso, los niños me decían: 'Papá, no quiero ir a la escuela, tengo miedo de que pase algo'. Durante un año, el pequeño decía: 'No puedo dormir solo'». «Fueron muchas noches así, sin dormir, solo pensando en esa mierda. Tienes algunas pesadillas. Cada vez que los niños están solos, tienen miedo...», añadió el gabonés.
«Todavía tengo esa casa, pero no he vuelto desde entonces. Creo que empezaré a alquilarla porque mis hijos no quieren ir a Barcelona», indicó Pierre-Emerick Aubameyang. «Su colegio hizo un viaje allí y ellos me dijeron que ni hablar», confesó.
Él, por su parte, considera que debió haberse puesto en manos de un especialista. «Si hubiera ido a un terapeuta o un psicólogo, tal vez me podría haber ayudado. Pero no quería hacer nada, estaba perdido», concluyó.