Varias prostitutas identifican al segundo de Ginés como uno de los extorsionadores

Efe

ESPAÑA

24 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Varias de las prostitutas que participaron ayer en la rueda de reconocimiento de tres de los agentes detenidos por la trama de corrupción policial de Coslada (Madrid) identificaron a Carlos M.?G., segundo del jefe de la policía local de esa localidad, como uno de los agentes que las extorsionaban.

Así lo confirmó en declaraciones a los periodistas el abogado de Carlos, Alberto Fernández-Palacios, que ha destacado que la rueda de reconocimiento ha sido «correcta, rigurosa» y que estaba «bien montada». «La rueda ha ido a favor de mi cliente», aseguró el letrado, que no precisó cuántas de las siete prostitutas que participaron en el reconocimiento identificaron a su cliente, y solo explicó: «Algunas sí lo reconocen y otras, no».

Los padres del acusado acompañaron a este en las dependencias judiciales, y su madre dijo a los periodistas que su hijo «está muy limpio» y que las meretrices que lo han reconocido lo han hecho porque «lo conocen de verlo patrullando».

Otros acusados

En esta prueba, además del segundo del jefe de la Policía Local de Coslada, Ginés Jiménez, tuvieron que participar los acusados Adrián J.?P. y Antonio José C.?A. Este último no fue reconocido por ninguna de las siete testigos protegidas, según aseguró su defensa.

Por su parte, el abogado de Adrián, Santos Rozalén, destacó que su cliente solo fue reconocido por una de las siete prostitutas que trabajaban en el club Oasis de Coslada, mientras que las otras seis ejercían su profesión en un polígono de Vicálvaro (Madrid). El letrado consideró que con este reconocimiento se confirma «lo que ha venido diciendo» Adrián, que declaró haber estado sólo en el Oasis. «No lo han reconocido las prostitutas relacionadas con los hechos que le imputan», sostuvo Rozalén.

Después de que se llevó a cabo la rueda de reconocimiento, el titular del Juzgado de Instrucción número 21 de Madrid, Eduardo Cruz Torres, que ayer levantó el secreto de sumario del caso, comenzó a tomar declaración a las siete prostitutas, que están compareciendo con los rostros ocultos, algunas con pasamontañas y otras con gafas de sol.