Jefes de policías locales de toda España creen que el caso de corrupción de Coslada pudo haberse evitado
ESPAÑA
Jefes de policías locales de toda España, agrupados en la principales asociaciones del sector, firmaron ayer un manifiesto en el que denuncian que el caso Coslada, de presunta corrupción policial, podría haberse evitado y por ello piden que se depuren las responsabilidades políticas que correspondan.
En una rueda de prensa a la que acudieron vestidos de uniforme una veintena de jefes de policías municipales de todo el país, el secretario general de Unijepol y jefe de la Policía Local de Fuenlabrada (Madrid), José Francisco Cano, subrayó que en el caso de Coslada quedó de manifiesto que fallaron los controles y que «alguien no ha hecho su trabajo». «El caso de Coslada nos está haciendo daño. No se puede tener a toda la policía local española bajo sospecha», lamentó.
Actividades irregulares
El responsable de Unijepol (Unión Nacional de Jefes y Directivos de Policía Local) reconoció que existían sospechas de las actividades irregulares del jefe de la Policía Local de Coslada, Ginés Jiménez, pero alertó de que «ser un sinvergüenza no es ser un delincuente», y que las denuncias deben ser probadas.
Para evitar en el futuro escándalos como el de Coslada, las organizaciones firmantes del manifiesto propusieron la creación de comités de ética profesional en todas las comunidades autónomas, que permitan la detección precoz de este tipo de desmanes.
De forma paralela, reclamaron la reforma de la Ley Orgánica de Fuerzas de Seguridad del Estado, aprobada hace más de veinte años, para que refleje las nuevas competencias asumidas de facto por los cuerpos de las policías municipales.