Un niño de 20 meses, sus padres y su abuela murieron al inhalar monóxido de carbono en la vivienda de la última tras celebrar el Domingo de Ramos
07 abr 2009 . Actualizado a las 02:44 h.Cuatro miembros de una familia aparecieron muertos ayer en Palencia tan solo unas horas después de haber celebrado de forma conjunta el Domingo de Ramos. Un bebé de veinte meses, sus padres y su abuela perecieron en una vivienda de la capital palentina por inhalar monóxido de carbono, una emanación al parecer procedente de la mala combustión de una caldera. Un joven de 20 años, también de la misma familia, se encuentra en estado muy grave, en coma profundo.
Un matrimonio y sus dos hijos se trasladaron hasta el domicilio de la abuela, M.?C., de 73 años, con la intención de pasar un día en familia. Pero se encontraron con el drama. La irregular combustión de una caldera de gas provocó una altísima concentración de monóxido de carbono, escape que resultó letal para cuatro personas: el matrimonio formado por Pablo González, de 41 años de edad, y su esposa B.?C., de 37; su bebé de 20 meses, y la abuela de este.
El Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León recibió el primer aviso a las 10.30 horas. Hasta el lugar del siniestro se trasladaron agentes de la policía local, del Cuerpo Nacional de Policía y de los bomberos de Palencia, que avisaron a la central de control de gas natural y a Emergencias Sanitarias, Sacyl, que envió una uvi móvil y una ambulancia de soporte vital básico. José Manuel González, del servicio 112, relató cómo se vivieron los primeros momentos: «Nuestros detectores comprobaron inmediatamente concentraciones altas de monóxido de carbono, por lo que rápidamente procedimos a abrir las ventanas para ventilar el aire, que es la única forma de eliminar el gas».
Joven en estado grave
Después comprobaron que en una sala se encontraba la abuela, en otra habitación el matrimonio con el bebé y, finalmente, en el cuarto de baño, estaba el joven de 20 años, muy afectado por la inhalación del gas. Es el hijo de una anterior relación sentimental de la mujer.
El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Francisco Javier Álvarez, confirmó que aunque el joven recibió una primera asistencia en el centro hospitalario de Palencia, tuvo que ser trasladado al hospital de Cantabria, donde hay una cámara hiperbárica capaz de procurar el oxígeno adecuado para intentar salvarle la vida. Sin embargo, el muchacho se encuentra grave, en estado de coma profundo, explicó el consejero de Sanidad de Castilla y León, Francisco Javier Álvarez Guisasola.
La ministra de Educación y Asuntos Sociales, Mercedes Cabrera, que se encontraba en un acto oficial en Valladolid, se trasladó a Palencia para expresar el pésame a la familia: «Lamento profundamente lo que ha ocurrido; son noticias que nos conmocionan y nos dejan desarmados», dijo. Añadió que son «accidentes trágicos y todos tenemos que colaborar», en referencia a la acumulación de casos similares al registrado en Palencia.
El Juzgado de Instrucción número 2 de Palencia se hizo cargo de la investigación del caso. En consecuencia, la Policía Judicial aportará todas las pesquisas para esclarecer por qué se produjo la defectuosa combustión en la caldera de gas. También serán necesarios los informes del servicio de extinción de incendios del Ayuntamiento de Palencia y de la empresa Gas Natural.
El suceso provocó una enorme conmoción en la capital palentina, especialmente en el barrio Ave María, donde se ubica el bloque de viviendas siniestrado. Los vecinos se mostraron muy sensibilizados después de la muerte de nueve personas por una explosión de gas en mayo del 2007 en la calle Gaspar-Arroyo. Precisamente, hasta el lugar del suceso se desplazó el presidente de la Asociación Gaspar Arroyo, José Luis Ansúa, que quiso expresar sus condolencias por lo sucedido y conocer detalles del accidente mortal.
Ansúa lamentó que el Parlamento español no haya tomado medidas vinculadas con las instalaciones de gas y los accidentes de este tipo. En concreto, hizo referencia a la solicitud que plantearon el año pasado varias entidades vecinales que agrupan a afectados por explosiones de gas en toda España ante el Congreso, para que creara una comisión de investigación destinada a estudiar las causas de que incidentes como el de ayer hayan proliferado en los últimos años.