El diputado suspendido de Unió Mallorquina (UM) y condenado a cuatro años y medio de prisión en un caso de corrupción, Bartomeu Vicens, dimitirá de su escaño en el Parlament balear y será sustituido por la concejala de UM en Andraitx Isabel Alemany.
Según confirmó ayer el presidente de UM, Miquel ángel Flaquer, el diputado dejará finalmente su escaño, tal y como han pedido el PSOE y el Bloc, socios de gobierno de UM, ante su condena hecha pública ayer. Flaquer afirmó que respeta la decisión de Vicens e indicó que en estos momentos es «lo mejor» para él, tanto personalmente como para dar «estabilidad» al Parlament y las instituciones de Baleares.
Vicens, por su parte, aseguró en una misiva que abandonará su escaño en el Parlament por recomendación de su abogado, pero que no pudo notificar en la Cámara insular su dimisión porque el registro cerró ayer a las 14.00 horas.
El anuncio de la dimisión se produjo después de que el presidente del Govern balear, Francesc Antich, anunciara ayer que gobernaría en minoría «mientras no dimita el diputado suspendido», con lo cual uno de los diputados que da apoyo al ejecutivo no votará para no contar con su sufragio. «Lo que haremos será gobernar como si él no estuviera», señaló Antich durante la rueda de prensa posterior al Consell de Govern.
Además, la Fiscalía Anticorrupción de Baleares pedirá al Tribunal Superior de Justicia de las islas medidas cautelares contra el diputado y ex portavoz parlamentario, entre las que no descarta el ingreso en prisión, según manifestado ayer el fiscal Juan Carrau al abogado de Vicens, Eduardo Valdivia.