Viajará a Bagdad apenas unas semanas después de que se aireasen los cables de la diplomacia estadounidense
10 ene 2011 . Actualizado a las 02:00 h.Todo listo tras casi siete meses de burocracia, gestiones internacionales, permisos y visados. Ya está fijada incluso la fecha exacta. Será el próximo 24 de enero. Ese día, en el hotel Palestina de Bagdad, el juez Santiago Pedraz reconstruirá la muerte del cámara de Telecinco José Couso, que acaeció el 8 de abril del 2003 bajo los proyectiles de uno de los primeros carros blindados de la 3.ª división de infantería del Ejército de Estados Unidos que entró en la capital iraquí.
Probablemente sea la reconstrucción criminal más complicada de la historia judicial española, habida cuenta de la situación de inseguridad que existe en Bagdad y la envergadura de la comisión judicial de la Audiencia Nacional que viajará.
Además de Pedraz está previsto que se desplacen durante tres días a Irak un secretario judicial, un funcionario de la Audiencia Nacional, un equipo de policías de ese juzgado, incluido el jefe de seguridad del tribunal de la calle Génova; los periodistas-testigos Jon Sistiaga, Olga Rodríguez, Jesús Manuel Hernández Quiñones y Carlos Hernández, y tres letrados de la familia y de la Asociación Libre de Abogados. Para dar protección a esta comisión, ha habido que movilizar incluso a la embajada española en Irak, que desplegará parte de sus agentes del GEO.
Esta «diligencia de prueba», aseguran responsables de la Audiencia Nacional, será clave para el futuro de este sumario.
Pedraz quiere saber de primera mano qué ocurrió exactamente aquel 8 de abril y determinar en qué circunstancias y desde dónde realizaron los militares estadounidenses -imputados por un presunto delito contra la comunidad internacional y otro contra las personas protegidas en caso de conflicto armado- el disparo contra el hotel que costó la vida a Couso y al reportero ucraniano de la agencia Reuters Taras Protsyuk.
Inspecciones oculares
Según los planes del instructor, habrá inspecciones oculares en toda la zona que rodea al hotel y buena parte de la reconstrucción tendrá lugar en la habitación 1.403 del Palestina, desde la que grababa el cámara español.
La Audiencia Nacional cuenta ya con los permisos pertinentes de los responsables del hotel (en el que en la actualidad se realizan trabajos de reforma) y de las autoridades iraquíes.
El viaje fue solicitado en julio por el juez Pedraz al Consejo General del Poder Judicial y se llevará a cabo tan solo unas semanas después de que los cables de la diplomacia norteamericana, aireados por Wikileaks, revelaran la presunta connivencia de la Fiscalía y miembros del Gobierno español con las autoridades de Estados Unidos para tratar de boicotear el sumario, que lleva ocho años abierto.