Irak autoriza al juez Pedraz a reconstruir el asesinato de Couso

Ivannia salazar REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

EE.UU. dice que los militares acusados podrían declarar en su país

26 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ya no tendrá que viajar como turista a Irak para reconstruir el asesinato del cámara José Couso, ya que las autoridades iraquíes no solo han autorizado las diligencias, sino que han designado al juez Shibad Ahmed para acompañar a la delegación judicial española.

En una providencia conocida ayer, el juez indica que la autorización le fue comunicada por la directora general de Cooperación Jurídica Internacional, Aurora Mejía, y explica que las «altas autoridades iraquíes» han aceptado «la práctica de la diligencia con prestación de auxilio judicial». Ahora, el fiscal Jesús Alonso tendrá que volver a informar sobre su posición con respecto al viaje, ya que había justificado la decisión de no desplazarse junto al resto de la delegación, compuesta por unas 18 personas, por considerarlo «legalmente inviable» debido a la falta de autorización iraquí.

Además de la negativa de la Fiscalía, el Ministerio de Justicia advirtió hace unos días al magistrado de los «riesgos existentes en materia de seguridad», y Aurora Mejía le transmitió su «altísima preocupación» por el viaje. Esto levantó ampollas entre la familia de Couso, que acusó al Gobierno de entorpecer la investigación y de ceder a las supuestas presiones de EE.UU. contenidas en los documentos hechos públicos por Wikileaks.

Independencia judicial

Fuentes del Gobierno estadounidense consultadas por La Voz señalaron que su país «nunca ha presionado a la Justicia española» en relación con el caso Couso y aseguraron que «creen plenamente en la independencia judicial». Además, explicaron que el Ejército de Estados Unidos llevó a cabo una investigación, pero, en un paralelismo con el caso de María José Carrascosa, consideraron que es posible que «las investigaciones de dos países lleguen a conclusiones diferentes».

A la pregunta de si los tres militares acusados por la muerte del cámara podrían declarar en España, las fuentes lo descartaron, pero añadieron que podrían declarar en Estados Unidos. En todo caso, insistieron en que en ningún momento la diplomacia estadounidense ha pretendido inmiscuirse en la investigación del juez Pedraz y manifestaron las condolencias a la familia del cámara diciendo que «no era intención de los militares disparar contra periodistas».