El presidente de Martinsa, Fernando Martín, el exalcalde de Boadilla del Monte Arturo González Panero y los empresarios José Luis Ulibarri y Amando Mayo continúan imputados en el caso Gürtel después de haber acudido ayer al Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).
Aunque de los cuatro imputados solo dos -Ulibarri y Mayo- contestaron a las preguntas del juez instructor del caso en el TSJM, Antonio Pedreira, todos acudieron al tribunal y no pidieron aplazamientos como en otras ocasiones. El primero en comparecer fue el presidente de Martinsa en relación con la actuación de su empresa en un proyecto urbanístico en Arganda del Rey (Madrid) en el 2006, pero Martín, que sigue imputado por los delitos de cohecho, contra la hacienda pública y blanqueo, solo hizo una declaración ante Pedreira para defender la legalidad de esa operación. «La adjudicación se hizo con la más estricta legalidad, con transparencia», afirmó, y añadió que sobre el tema ya hay sentencias judiciales que acreditan que todo se hizo correctamente.
La policía atribuye al presidente de la constructora el pago de 12.870.000 euros al cabecilla de la trama, Francisco Correa, como comisión para lograr la adjudicación. Después, a través de una nota, Martín explicó que se ha acogido a su derecho a no declarar por entender que el TSJM no es competente para la instrucción del caso, y reiteró que «ni él ni la compañía tienen relación alguna con los hechos que se relatan en el informe de la policía».