Chaves asegura que había una fuerte competencia con otros países
07 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El Gobierno y el PP coinciden en avalar el acuerdo alcanzado para convertir la base de Rota en el principal centro naval del sistema antimisiles de la OTAN, aunque los populares exigen explicaciones al presidente del Ejecutivo a pesar de que aplauden «el salto cualitativo» dado al vínculo estratégico con EE.?UU.
El responsable de relaciones internacionales del PP, Jorge Moragas, se felicitó por el cambio de rumbo promovido por José Luís Rodríguez Zapatero. «Se ha dado cuenta de que la alianza buena es la OTAN y no la meliflua y retórica Alianza de Civilizaciones», argumentó el dirigente popular.
Por su parte, los responsables socialistas se centraron en las bondades económicas que supone este acuerdo para España. La presencia de cuatro buques destructores estadounidenses en el Estrecho generará unos beneficios de 51 millones de euros al año desde octubre del 2013, cuando comiencen a desplegarse los primeros efectivos, según detalló la ministra de Defensa, Carme Chacón. El vicepresidente Manuel Chaves destacó la fuerte competencia con otros países mediterráneos por hacerse con unas instalaciones que generarán empleo en una zona muy deprimida, como la bahía de Cádiz. A la presencia de 1.100 militares, cien civiles y el resto de familiares de los soldados, 3.400 en total, se suma la creación de unos 220 puestos de trabajo directos y 772 indirectos y el impacto de la contratación de servicios, incluido de mantenimiento, que alcanzarían los 8,5 millones de euros al año.
Chacón señaló que el sistema de defensa antimisiles Aegis «refuerza la posición geoestratégica de España a las puertas del Mediterráneo y los lazos con la defensa aliada y con Estados Unidos». Todo ello, añadió Chaves, «sin sumar riesgos, solo eliminándolos», ya que tiene un objetivo defensivo y disuasorio «ante la creciente proliferación de armamento en Estados o grupos que no respetan la legislación internacional». La ministra de Defensa, en cambio, no quiso responder a las críticas de Rusia por el despliegue aprobado en Rota.