Roca admite algunos cohechos e intenta demostrar su talento en los negocios

Efe

ESPAÑA

Los casi seis años que lleva en prisión han servido a Roca para estudiar minuciosamente la causa.

08 nov 2011 . Actualizado a las 16:21 h.

El exasesor de Urbanismo del Ayuntamiento de Marbella y presunto cerebro del «caso Malaya», Juan Antonio Roca, ha admitido hoy durante su declaración que pudo cometer algunos cohechos, pero no solo no ha bajado su tono altivo, sino que ha intentado demostrar su capacidad con los negocios.

Roca ha interpelado en numerosas ocasiones al fiscal anticorrupción porque ha afirmado que no le estaba dando todos los datos a la Sala, por lo que el presidente del tribunal ha tenido incluso que advertirle de que debe dirigirse a la Fiscalía «con más respeto» y le ha recordado su condición de acusado.

El exasesor ha contestado que lo hace porque tiene que defenderse y se ha preguntado en voz alta: «¿Después de seis años en prisión, y de haberme registrado todas mis viviendas, me pide usted (en referencia al fiscal) que aporte yo documentos?»

El fiscal, con mucha calma, ha entrado en debate con el acusado, pero ambos han subido el tono de voz, por lo que el presidente de la Sala ha suspendido durante unos veinte minutos la sesión para calmar el ambiente. Sin bajar su tono altivo y retador, Roca ha intentado difuminar los hechos delictivos que pudo cometer y ha pedido al fiscal que cuente todos los hechos, no solo los que le interesan para la acusación.

Fuentes cercanas a Roca han asegurado que, normalmente, cuando sube el tono de voz se debe a que tiene problemas de audición, y que lleva seis años en prisión esperando este momento, por lo que tiene muy claro que quiere defenderse. Estas fuentes han señalado que cualquier otra persona que llevara tantos años en prisión estaría mucho peor psicológicamente, pero que Roca no puede venirse abajo porque su familia depende de él.

Han reconocido que su línea de defensa ha cambiado y que actualmente quiere buscar la calificación de los pagos como cohecho impropio castigado con multa en vez de cárcel. Por ello, durante su declaración ha intentado «difuminar» el delito de cohecho y ha retado al fiscal a «explicárselo más despacio si no lo entiende». También se ha mostrado dispuesto a facilitar datos a la Sala para que se «ilustre». «Esa falta de respeto no se la voy a permitir», le ha advertido en un momento de la sesión el fiscal, con el que se ha mostrado de acuerdo el presidente del Tribunal, por lo que Roca ha pedido disculpas.

Los casi seis años que lleva en prisión han servido a Roca para estudiar minuciosamente la causa y por ello siempre lleva consigo libretas y anotaciones. Ha llegado su momento e intenta contar su verdad de forma vehemente y sin importarle las consecuencias que puedan causar sus palabras porque así lo había dicho en otras ocasiones. Roca reconoció ayer que había recibido dinero de hasta tres empresas por asesorarles en sus actividades y admitió además haber gratificado a los concejales. Entre los concejales que «gratificó» se encuentran la exalcaldesa Marisol Yagüe, el exconcejal andalucista Carlos Fernández, fugado de la Justicia, y la que fue el azote de Jesús Gil durante muchos años, Isabel García Marcos. El objetivo de los pagos, según la versión de Roca, era que se mantuvieran unidos hasta las elecciones de 2007 y no hubiera transfuguismo.