La ponencia social del congreso aboga por tener en cuenta la dispersión poblacional para la financiación autonómica
18 feb 2012 . Actualizado a las 10:23 h.No quiere el PP gallego perder cuota en la cúpula del español, donde hasta ahora hallaban acomodo, Rajoy a un lado, cinco da terra: Alberto Núñez Feijoo, Ana Pastor, José Manuel Barreiro, su tocayo Romay Beccaría y Corina Porro, la cual saldrá seguro de ahí, después de haber renunciado a su militancia para asumir las riendas del Consello Económico e Social. ¿Mantendrá la comunidad todos esos asientos en el nuevo comité ejecutivo que Mariano Rajoy dará hoy a conocer? Consultado al respecto, el propio presidente de la Xunta, muy resuelto, sentenció ayer: «De eso no bajamos. Seguro».
Había llegado Feijoo al congreso en un avión fletado por el PP coruñés, muy de domingo, arreglado pero sin corbata, risueño y con los deberes ya medio hechos: un pacto para la entrada en la dirección de al menos un representante gallego hasta el momento ajeno a esas lides. Hombre o mujer, eso no lo aclaró. Ni su edad. Ni tampoco la adscripción geográfica.
Sí dio a entender, en cambio, que no se trata de su mano derecha, Alfonso Rueda, pues dijo no creer en la procedencia de que coincidan en la ejecutiva nacional el presidente y el secretario general del PPdeG. Con esa línea argumental, igualmente habría que dar por descartados para la irrupción en Madrid a líderes provinciales como Carlos Negreira, si bien fuentes no oficiales, sin embargo, lo sitúan ya dentro. Feijoo podría apostar también por potenciar a personas de su confianza con otros perfiles, jugando, por ejemplo, la baza de la juventud, que encarna, entre otros, el alcalde de Ferrol, José Manuel Rey.
Quinielas al margen, en el plano de las ideas también ganó ayer Galicia un par de batallas: una librándola y otra sin siquiera ir a la guerra. Al alimón con los asturianos, los populares de la comunidad lograron la incorporación de una enmienda a la ponencia social del cónclave en virtud de la cual la dispersión poblacional debería pesar a la hora de redefinir el modelo de financiación autonómica.
Además, a instancias del dirigente vasco Antonio Basagoiti, el documento político que hoy será sometido a votación incluirá finalmente el «reconocimiento expreso de que el cambio en España comenzó por Galicia [con las elecciones autonómicas del 2009]», según fuentes conocedoras del texto. El texto económico, asimismo, abogará por atajar la crisis del sector naval impulsando fórmulas de financiación y posibles cambios normativos «beneficiosos» tanto para los astilleros de Vigo como para los de Ferrol.
la delegación gallega busca conservar peso en la dirección