El Gobierno adelanta la retirada de la misión militar en el Líbano para ahorrar costes

a. a. madrid / colpisa

ESPAÑA

La crisis y el recorte en el presupuesto aconsejan a las Fuerzas Armadas «la racionalización al máximo» del esfuerzo militar en el exterior

18 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La crisis y el recorte en el presupuesto aconsejan a las Fuerzas Armadas «la racionalización al máximo» del esfuerzo militar en el exterior. Estas palabras sirvieron ayer como justificación al ministro de Defensa, Pedro Morenés, para hacer público que España acelerará la retirada de los cerca de mil soldados que mantiene desplegados en la frontera entre Israel y el Líbano en la misión Finul. Según Morenés, el Gobierno, cumplidos buena parte de los objetivos, cuenta con el beneplácito de la ONU y de sus aliados sobre el terreno, Francia e Italia, esencialmente, para iniciar la retirada. Está previsto que antes de fin de año se haya replegado ya el 50% en vez de los 200 soldados inicialmente previstos. La misión comenzó en el 2006 al amparo de una resolución de Naciones Unidas tras la última guerra entre Israel y la milicia Hezbolá.

Tras calificar de alarmante el recorte presupuestario en su ministerio, Morenés admitió en la Comisión de Defensa del Congreso que seguirá sufriendo los rigores del ajuste y que tiene sobre la mesa un informe del jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), Fernando García Sánchez, que plantea para los próximos 13 años la reducción de 15.000 militares y 5.000 civiles entre los 152.000 profesionales de las Fuerzas Armadas. Aunque, matizó, «es solo una opinión. El Jemad no hace la política de defensa de España», sino que compete al Gobierno, afirmó.