Dirigentes el PP arropan a De Cospedal para evitar la imagen de desavenencias internas
ESPAÑA
La dirección popular teme que la errática gestión informativa de Génova sobre el caso Bárcenas y el malestar de algunos dirigentes con la secretaria general, María Dolores de Cospedal, genere una división interna y una merma en el liderazgo de Rajoy que serían muy dañinos en estos momentos. Y más, cuando una de las principales bazas políticas que el PP utiliza contra el PSOE es precisamente la falta de autoridad de Rubalcaba en su propio partido.
Conscientes del peligro, un día después del apagón informativo decretado en torno a Bárcenas y de la suspensión de una anunciada rueda de prensa, varios dirigentes lanzaron ayer públicas muestras de apoyo a De Cospedal. Y el primero fue su mayor enemigo interno, el vicesecretario de política autonómica y local, Javier Arenas, que negó que ella esté siendo cuestionada y aseguró que su labor es respaldada «por todo el partido».
Significativa fue la defensa de la secretaria general realizada por el secretario general del Grupo Popular en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro. La intención es demostrar que, junto con el respaldo del partido, tiene el apoyo del grupo parlamentario. Según Bermúdez de Castro, el PP está «unido y cohesionado en torno a un gran proyecto», algo que, según dijo, «no pueden decir otros», en alusión al PSOE.
Y más directo, aunque admitiendo implícitamente que existen problemas, se mostró el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, que reclamó a «todos los militantes y dirigentes» el «máximo apoyo» para el presidente y la secretaria general. «De Cospedal y Rajoy están haciendo lo que tienen que hacer: defender la honestidad del PP, porque hay un señor que vivió dentro del PP y se ha forrado, y algo estarán haciendo bien cuando ese señor está muy enfadado», señaló Basagoiti.
Los populares intentaron negar también que el retraso en la presentación de las acciones judiciales sobre el caso, que ha superado ya todos los plazos, se deba a la división interna. El PP sigue debatiendo si se debe actuar contra Bárcenas y si hay que incluir a los medios que difunden las informaciones. Arenas afirmó que la tardanza se debe a «la prudencia y los análisis serios», mientras Bermúdez de Castro, tras negar que la dilación tenga que ver con las desavenencias, aseguró que «las prisas y las precipitaciones en este terreno no son buenas consejeras».
Piden la declaración de bienes
Mientras, el cerco judicial sobre el extesorero continúa. La Fiscalía Anticorrupción pidió al Senado la declaración de bienes patrimoniales que presentó Bárcenas y a la que están obligados los senadores. Los servicios jurídicos de la Cámara alta estudian la legalidad de la medida, dado que cuando el imputado era senador esos datos no se hacían públicos como ahora.
Y en la Audiencia Nacional, el juez Javier Gómez Bermúdez acordó ayer abrir diligencias previas por la querella de IU contra los extesoreros Álvaro Lapuerta y Luis Bárcenas y otros dirigentes del PP por los supuestos pagos en dinero negro a miembros del partido.