Barcelona rechaza la rebaja de sueldos de los concejales con los votos de CiU, C's, PSC y PP

Europa Press

ESPAÑA

Marta Pérez | EFE

Los partidos de la oposición estarán representados en las empresas municipales

14 jul 2015 . Actualizado a las 18:13 h.

El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este martes en el pleno el cartapacio municipal, que incluye la congelación de las retribuciones de cargos públicos después de que CiU, C's, PSC y PP hayan presentado una enmienda en contra de la propuesta de rebaja del Gobierno de BComú.

El Gobierno de Ada Colau propuso rebajar el sueldo de la alcaldesa un 27 % -hasta los 80.115 euros-, un 24 % los de los tenientes de alcalde y portavoces del Gobierno -70.019 euros- y un 17 % el de los portavoces adjuntos de los grupos municipales, con 64.000, algo que CiU, C's, PSC y PP rechazan porque ya hubo rebajas en el 2008, 2010 y 2012.

Con la enmienda presentada y aprobada por CiU, C's, PSC y PP, el sueldo de Colau será de 100.000 euros -sin embargo, ella y los ediles de BComú cobrarán un máximo de 2.200 por su código ético-; el de los tenientes de alcalde y portavoces del Gobierno, de 98.192; el de los presidentes de grupo municipal, de 92.600; el de concejales del Gobierno y portavoces de la oposición, de 84.532, y el de edil de la oposición, de 56.387.

El pleno -el primero presidido por Colau-, ha aprobado el nombramiento de representantes en los consejos de administración de las empresas de capital íntegramente municipal, que tendrán representación de todos los grupos y reflejará el pleno en el caso de Barcelona de Serveis Municipals (B:SM), a propuesta de la oposición, que rechazó la apuesta del Gobierno municipal de tener mayoría en todos los consejos para mejorar la tarea ejecutiva.

Comisiones

También ha aprobado por unanimidad crear cuatro comisiones municipales: de Economía y Hacienda, que estará presidida por Carina Mejías (C's); de Derechos Sociales, Cultura y Deportes, por Montserrat Benedí (ERC); de Presidencia, Derechos de la Ciudadanía, Participación, Seguridad y Prevención, por Francina Vila (CiU), y de Ecología, Urbanismo y Movilidad, por Daniel Mòdol (PSC).

La comisión de Economía y Hacienda abordará la promoción económica, el empleo, el turismo, comercio y consumo, y tiene potestades tributarias, presupuestarias, financieras, y la de Derechos Sociales, Cultura y Deportes tratará la calidad de vida, la igualdad, salud, educación y vivienda, entre otros.

La de Presidencia, Derechos de Ciudadanía, Participación, Seguridad y Prevención abordará las relaciones institucionales e internacionales, asuntos sobre el Área Metropolitana, el régimen interior, conocimiento, innovación, transparencia e inmigración, y la de Ecología, Urbanismo y Movilidad se ocupará, entre otros, de contaminación, residuos y licencias.

El pleno también ha aprobado modificar las normas reguladoras de los distritos -con todos los partidos a favor excepto la CUP, que ha votado en contra-, nombrar los representantes municipales en el Área Metropolitana -por unanimidad- y en el Consorcio del Centro de Cultura Contemporánea Casa de la Caritat y en la Zona Franca.

Defensa del diálogo

Colau ha agradecido el trabajo de los concejales para sacar adelante el cartapacio, ha considerado que «a ningún Gobierno anterior se le ha pedido tanto como a este», y ha asegurado que trabajará para avanzar hacia una ciudad más justa y mejor.

El primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, ha dicho que el Gobierno municipal se tiene que regir por el mandato ciudadano y debe comprometerse con combatir la desigualdad y la precarización y para trabajar por un modelo económica justo, eficiente y sostenible.

El exalcalde Xavier Trias (CiU) ha tildado de incomprensible que haya costado tanto la aprobación del cartapacio, y ha pedido al Gobierno diálogo y marcar prioridades, tras reprochar: «Parece que se está más por explicarse a través de selfies, tuits e imágenes que no por hacer el trabajo que hay que hacer».

La líder de C's, Carina Mejías, ha coincidido en señalar la importancia del diálogo, el pacto y la negociación, y ha reclamado que se pase «del activismo de las plazas a la política del Ayuntamiento» y que se impulsen medidas para crear empleo y diversificar el modelo productivo.

Desde ERC, Alfred Bosch, también ha recalcado la importancia del diálogo, el consenso y la ética en la toma de decisiones, y ha defendido «la capitalidad de Catalunya para conseguir objetivos nacionales y sociales» que, para su formación, son inseparables.

Negociaciones

Jaume Collboni (PSC) ha avisado de que no se puede construir una ciudad con 11 concejales y sin acuerdos, remarcando la importancia del diálogo y del respeto a la pluralidad, y ha criticado que el consistorio ha dado «cierto espectáculo» debatiendo el cartapacio en lugar de impulsar medidas que den respuesta a las necesidades de la ciudad.

El líder municipal del PP, Alberto Fernández, ha pedido de que «la oleada transformadora no acabe convirtiéndose en un tsunami producido por el populismo y la demagogia», y ha celebrado que el Gobierno haya modificado su propuesta inicial respecto a la representación de los partidos en las empresas municipales.

Desde la CUP-Capgirem Barcelona, Maria Rovira ha lamentado el «espectáculo dantesco» de las negociaciones del cartapacio, mientras que Maria José Lecha ha resaltado que el partido apoyará políticas realmente rupturistas, y no de gestos ni continuistas neoliberales maquilladas, en sus palabras.